Señor editorial. Se ha desencadenado una ofensiva de los sectores hostiles al procurador Alejandro Ordóñez. Toda la prensa afín al gobierno de la Prosperidad ha enfilado sus baterías editoriales contra la reelección del jefe del Ministerio Público, como lo denunció ayer en su editorial El Nuevo Siglo, todo a sabiendas de que no pueden impedir su reelección.
Apartes. En La Barca hacemos eco a los principales apartes: "Se ha desatado una campaña grotesca e implacable de los sectores hostiles a la actividad del procurador Alejandro Ordóñez, a sabiendas de que no pueden impedir que el Congreso de la República, según lo que dicta la Constitución y los compromisos políticos de las fuerzas mayoritarias, proceda en consecuencia.
Es dable estar o no con las creencias religiosas del Procurador, lo que no es razonable es combatirlo por ser fiel a su credo que, entre otras cosas, corresponde al sentimiento cristiano de la mayoría de los colombianos. Una equívoca interpretación de la democracia consiste en pretender que los sectores minoritarios excomulguen a los representantes de las mayorías".
Precisiones. "Los más recalcitrantes que repudian la eventual reelección del Procurador no aducen fallas en su gestión, ni violación de la ley, ni cosa parecida, sencillamente les repugna su condición de hombre de carácter. Siendo que por esa misma cualidad en los sondeos de opinión el alto funcionario figura entre los que más suscitan el fervor popular.
El Nuevo Siglo. El reflexivo editorial planteó las condiciones para su nominación en la terna de la que escoge el Congreso al Procurador por parte del presidente Juan Manuel Santos, que estaba en el ambiente. La Corte Suprema de Justicia se adelantó. Por tratarse de un organismo de tanta respetabilidad e independencia, la nominación por parte de la Corte refuerza su posición. Se requiere un hombre de firmes convicciones y con la resolución inquebrantable de cumplir el deber hasta el sacrificio, sin importar de cual partido, ni tendencia política sean los funcionarios públicos que sanciona". La sola postulación del corajudo santandereano paralizó las redes sociales y tiene encendida la opinión nacional.
¡Que se suicide! Y subraya el editorialista: "En el entendido de que con los votos que se han cantado en el Congreso saldrá elegido, algunos columnistas incendiarios que lo abominan proponen que renuncie, no aspire a la reelección y, en últimas, se suicide".
Superintendente. El barquero supo que el ministro de Salud Alejandro Gaviria retrasó su posesión ante la postulación que se había hecho del ex contralor de Bogotá Mario Solano como Superintendente de Salud.
El Ministro pidió plena autonomía para el ejercicio de sus labores y ante la sola insinuación de llegar al despacho con un Súper ya nombrado, le puso freno a su posesión hasta dejar por fuera el nombre del ex contralor. Esta es una demostración de su carácter y de la tarea que desempeña en pro de la Salud.
Antes de que nombraran a Gaviria, el ex director de Caprecom Mario Urán
(ficha de Roy Barreras) propaló la falsa versión de su designación como Ministro de Salud. ¿Será que ahora le apostará a la Superintendencia?