LA BARCA DE CALDERON | El Nuevo Siglo
Miércoles, 12 de Septiembre de 2012

Marcha por la verdad. A los numerosos conflictos internacionales que ha cubierto y la lucha permanente por la libertad de los secuestrados a través del único programa de radio en el mundo que su creador quiere acabar, pero no puede, Herbin Hoyos Medina tiene otro reto: no dejar que las Farc "se pasen por la galleta" humanitaria su responsabilidad en centenares de secuestrados de los que poco o nada se sabe. El 8 de octubre, cuando los negociadores guerrilleros estén en las mesas de discusión con los voceros oficiales en Oslo, Hoyos Medina presidirá la "Marcha por la Verdad" para que se pronuncien los miles de familiares de secuestrados de los que las Farc dicen, con todo cinismo, que no los tienen y que ni siquiera habrá restos de ellos.

 

Corresponsal del conflicto. Hoyos Medina, el único periodista colombiano, real corresponsal de guerra en conflictos internacionales, con reconocimientos como director de los Programas radiales "Colombia Universal - Reportajes" "Amanecer en América" y "Las Voces del Secuestro". Con el administrador de empresas y logístico Fredemiro Núñez Cruz, cofundador y próximo a sacar su obra poética, Hoyos Medina es el otro quijote opita.

 

Reconocimientos. Herbin ha obtenido 84 premios y reconocimientos nacionales e internacionales, su vida ha estado signada por el riesgo, que pareciera ser su mejor estimulante. Se ha entrenado y practica salvamento y rescate aéreo, acuático, automovilístico y espacios confinados, primeros auxilios, pruebas de supervivencia, manejo de crisis, y tiene licencia de piloto privado de aviación, además de ser miembro fundador y activo del Grupo de Búsqueda Aérea y Rescates (BAYR).

 

Quijote de la guerra. Hoyos afirma que la Marcha no tiene el objetivo de ser una talanquera al proceso de paz, pero sí una piedra en el zapato de las mentiras de "Timochenko" y sus muchachos, tan orondos en sus falsas versiones frente al irremediable dolor de las víctimas. Después de sus misiones humanitarias en Bosnia Herzegovina, Kosovo, Sierra Leona, Belgrado, Sarajevo, Irak y Chechenia, donde fue torturado por las autodefensas de Grozny, el intrépido periodista se lanza contra la nueva farsa, en una tarea de caballero andante, de Quijote opita y de Robin Hood del dolor de la guerra nacional.

 

Exiliado. Amenazado con su familia, en octubre de 2009 debió dejar el país cuando le advirtieron de un plan para asesinarlo, orquestado y maquinado por las Farc, que de manera hipócrita le acusaban de lucrarse del dolor de los secuestros, en un ridículo sainete montado por los jefes terroristas para vilipendiar a quien más los ha puesto en evidencia como carceleros de la libertad.