Por sus presuntos nexos con el paramilitarismo, la Fiscalía delegada ante la Corte Suprema de Justicia llamó a juicio al exgobernador de Chocó, Julio Ibargüen Mosquera.

El organismo investigador acusó a Ibargüen Mosquera por la presunta comisión en el delito de concierto para delinquir agravado.

La investigación en contra del exgobernador está relacionada con sus presuntos nexos como candidato y luego como mandatario con el bloque Elmer Cárdenas de las autodefensas, cuyo jefe era Freddy Rendón Herrera, alias El Alemán.

El proceso se derivó de las indagaciones adelantadas por la Corte Suprema de Justicia sobre el denominado ‘Acuerdo de Singapur’ en el que alias El Alemán apoyó a políticos del Chocó y por el que ya fueron condenados Odín Horacio Sánchez Montes de Oca y Eulises Torres Murillo.

A través de esta injerencia, según la investigación, Rendón Herrera pretendía avanzar en el proyecto político de las autodefensas, que incluyó apoyo económicos y logístico para la campaña a la Gobernación del Chocó.

Ibargüen Mosquera se encuentra en prisión desde el pasado 21 de febrero, por decisión de la entonces fiscal delegada ante la Corte Suprema de Justicia, Martha Lucía Zamora. 

La decisión de proferirle medida de aseguramiento se tomó teniendo en cuenta las declaraciones de ex miembros de las autodefensas, quienes vinculan a Ibargüen con el Bloque Elmer Cárdenas de las autodefensas.

Ibargüen se encontraban con detención domiciliaria en su lugar de residencia y luego de la medida de aseguramiento en su contra será enviado a una cárcel.

Verdad Abierta publicó en su momento que, según El Alemán, el ‘Acuerdo de Singapur’ se realizó entre los movimientos políticos de Édgar Eulises Torres y el de Odín Sánchez, con el fin de apoyar al profesor Julio Ibargüen Mosquera en su candidatura a la gobernación.

El acuerdo, en el que El Alemán no estuvo presente, se realizó en Quibdó en el año 2003.

El Alemán dejó claro en sus declaraciones que los políticos con quienes, según él, se reunió con frecuencia fueron sus amigos. “No es nada personal contra ustedes, sólo pienso que si esas reuniones fueron un delito, ustedes deben asumir su responsabilidad, así como nosotros asumimos la nuestra”.