Revirtiendo el fallo de otro despacho que consideró que el ex director del Departamento Nacional de Estupefacientes (DNE), Carlos Albornoz, no representaba un peligro para la sociedad y le otorgó el beneficio de la libertad condicional dentro del proceso que se le adelanta por un supuesto manejo de bienes la mafia, otro juez de la República ordenó la inmediata captura del exfuncionario.
Dentro de la misma diligencia, el juez ordenó la captura del ex subdirector jurídico del DNE, Carlos Robledo y del comprador de la Granja 32, Tito Perilla, implicados también en el manejo de bienes grandes capos narcotraficantes.
Albornoz ya había sido condenado por la Procuraduría, destituyéndolo de su cargo e inhabilitándolo por un periodo de 14 años para ocupar cargos públicos.
En dicha sentencia, el ministerio público afirma que “el funcionario no habría protegido los intereses del Estado" en el manejo de dos predios y habría alterado las actas que permitieron al ex fiscal antimafia, Camilo Bula, vender propiedades incautadas a mafiosos por al menos $20 mil millones por debajo de su valor real.
Además, el ex director del DNE también estaría implicado en el caso de la finca cafetera "La Argentina" (Caldas), donde según la investigacón de la Procuraduría, la intervención del funcionario fue decisiva para el nombramiento de Luis Fernando Vargas como administrador de dicha propiedad.
Vargas, habría reportado perdidas en el manejo del predio, que producia $700 millones por cosecha, el cual al ser incuatado por las autoridades, aún mantenia la producción de café de manera ilegal y con la colaboración del administrador.
“El manejo que se le dio a la finca estuvo rodeado de irregularidades durante la permanencia del depositario Vargas Vargas, las cuales se derivaron en la injerencia en el manejo del bien por parte de su propietario”, sentencia la Procuraduría en su investigación.
La recaptura de Albornoz también se dicta por su participación en la alteración de las actas sobre la gestión del ex fiscal Bula sobre los bienes incautados al clan Náser en Barranquilla.