Uno de los mayores problemas y que más quejas de la ciudadanía en Bogotá suscitan es la inseguridad que se registra en Transmilenio. Por instrucciones del Gobierno central, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón realizó una visita a estaciones e hizo recorrido en los buses articulados para apersonarse in situ de la situación.
Luego de enterarse de problemas de intolerancia, robos, colados y abusos contra mujeres, el ministro anunció varias estrategias para recuperar el orden en el sistema masivo de transporte. La más importante: creación de un grupo especializado de la policía exclusivo para Transmilenio, además del aumento de pie de fuerza, con 400 unidades más, hombres y mujeres, entre los que se destinan 70 encubiertos, también ofreció recompensas a quienes denuncien a delincuentes que operan en buses y estaciones. Son medidas para llevar tranquilidad y confianza a los usuarios. Es clave para el éxito que las políticas de seguridad sean sostenidas, ya que la opinión pública estará pendiente de que se cumplan.