A pasolento avanza en el Legislativo la discusión de la reforma tributaria en el que ayer se vieron algunas modificaciones al texto inicialmente propuesto, como que la medicina prepagada no será gravada con el impuesto del IVA del 16% hasta tanto el Gobierno no entregue las garantías de la prestación de un servicio óptimo.
Así lo planteó el presidente de la Comisión Tercera de la Cámara, Hernando Padaui (Cambio Radical) al explicar que hay dos propuestas sobre la mesa, una, la del Gobierno, para que se grave la medicina prepagada con el 16% “y nosotros planteamos en la comisión que debe quedar excluida de cualquier impuesto de valor agregado. El Ministro y el Gobierno plantea un posición intermedia, que se grave con el IVA lo correspondiente a la facturación, esto correspondería más o menos a un 10%”.
Sin embargo una de las subcomisiones creadas para estudiar tal fin propuso durante un encuentro con el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, y que fue reiterado en la sesión de las comisiones terceras conjuntas ayer, “que la medicina prepagada quede en el 5% porque mientras el Estado no nos brinde un sistema de salud óptimo que nos permita acceder a la salud eficientemente, no lo haremos. La medicina prepagada no es un consumo de lujo sino una necesidad”.
Posición que fue compartida por el senador Samuel Arrieta (PIN), ya que “hoy pagamos por IVA prepagada el 10% pero la salud prepagada no es un lujo sino una necesidad. No los podemos gravar y castigarlos por eso, al contrario, debemos estimular eso y la propuesta es que quede en el 5%”.
Padaui también explicó que se planteó eliminar de la partida arancelaria a los motores fuera de borda hasta de 115 caballos de fuerza y la partida de los motores diesel hasta por 150 caballos de fuerza. “Estos deberían quedar dentro del esquema de tarifas general que plantea el estatuto tributario. También se evaluó de manera positiva que en el artículo 49 se busca crear un mecanismo de estímulo a los productores para la adquisición de seguro agropecuario debido a que se plantea la reducción de su IVA con la aprobación de esta reforma del 16 al 5%”.
Otro de los planteamientos se enfoca en la revisión de las empresas que se crean bajo la figura de club social para evitar el pago de algunos impuestos “y evadir la normatividad sobre la apertura y cierre en el caso de las discotecas. Hay muchos establecimientos que se esconden bajo esta modalidad para ajustarse a una tarifa diferencial”, añadió Padaui.
En cuanto a los servicios de giros postales, el Congreso le solicitó al Gobierno eliminar “la exclusión en el Inciso 2 del artículo 476 del estatuto tributario debido a que un gran porcentaje de las remesas que llegan a través de este medio hacia familias de ingresos medios y bajos son los que se verían afectados por este impuesto”.
Además, actualmente hay conceptos de la Corte Constitucional que consideran que los servicios postales son transporte de carga.
El presidente de la Comisión Tercera del Senado, Camilo Sánchez (Partido Liberal), indicó que hay una propuesta del Gobierno sobre la pensión voluntaria de pagar el 20% “y hemos visto que no va a ser ni el 5% ni el 20% sino que hay que llegar a un punto de encuentro”.
Al referirse a los paraísos fiscales, explicó que “se le va meter la mano a los grandes capitales, no estamos mirando simplemente a los asalariados puesto que los grandes capitales van a tener que pagar lo que les corresponden y no permitiremos que esas empresas se creen con todos los recursos y no tengan que pagar un solo peso”.
De otro lado, el senador Arrieta le comentó a EL NUEVO SIGLO que en lo que respecta a las zonas francas que no estaban previstas en este proyecto, “es claro que no se les va a gravar con el impuesto CREE, sino que van a seguir tal cual como venían que es el 15% de impuesto a la renta más los parafiscales. Esto para no desestimularlas”.
Afirmó que únicamente las zonas francas que se hayan creado hasta el 31 de diciembre de 2012, sino las que se creen desde el 2013 serán las que pagarán el CREE.