Italia recupera a su gran estrella Mario Balotelli para cerrar este martes su clasificación para el Mundial-2014, ante una selección checa que enterró buena parte de sus posibilidades el viernes al perder contra Armenia.

En la última jornada de clasificación mundialista todo sonrió a los de Cesare Prandelli: la Azurra derrotó a Bulgaria en Palermo (1-0) y la República Checa perdió inexplicablemente en Praga ante Armenia (2-1).

Tras esos resultados, Italia encabeza el grupo B con 17 puntos, por 10 de Bulgaria y nueve de la República Checa, Armenia y Dinamarca.

En caso de victoria, Italia lograría matemáticamente su billete para Brasil a dos jornadas para el final de la fase preliminar, algo histórico para la tetracampeona del mundo, ya que nunca se clasificó tan pronto.

Incluso, aunque Italia no ganase en Turín a los checos el martes, todavía tendría otras oportunidades, en octubre en Dinamarca o en casa ante Armenia. O esperar tropiezos de sus rivales, por lo que sólo una cadena de desastres parece poder apartar a los hombres de Cesare Prandelli del camino hacia Brasil.

"Todavía no estamos clasificados, tenemos que ganar el martes y recuperar fuerzas para lograrlo. Mientras no sea matemáticamente, no hay nada conseguido", avisó Prandelli tras el triunfo.

Para lograr la clasificación este martes, el técnico de la Nazionale cuenta con el regreso de los delanteros Mario Balotelli y del italo-argentino Daniel Pablo Osvaldo, así como del centrocampista del Milan Riccardo Montolivo, ausentes contra los búlgaros por sanción.

Estos jugadores son piezas clave del "sistema Prandelli", ese con el que Italia quiere dejar atrás el "catenaccio" y cambiarlo por un juego más atractivo y de ataque, por lo que su ausencia se notó contra Bulgaria y a Italia acabaron salvándola dos de los veteranos campeones del Mundo-2006: Gianluigi Buffon con sus paradas y Alberto Gilardino con su gol.

Prandelli tendrá que hacer varios cambios en defensa por las bajas de Ignazio Abate, Luca Antonelli y Andrea Barzagli, que en principio no jugarán.

Eso obligará al técnico a retrasar al centrocampista Daniele de Rossi al centro de la defensa, una opción ya utilizada en otras ocasiones.

Cristian Maggio y Emanuele Giaccherini deberían, en principio, ocupar los laterales.

La República Checa, por su parte, está obligada a ganar en Italia si quiere seguir teniendo opciones de clasificarse para el repechaje.

La derrota en Praga ante Armenia el pasado viernes deja el grupo muy abierto en la lucha por la segunda plaza: la ventaja, en principio, es para Bulgaria, que cuenta con un punto más que la República Checa, Armenia y Dinamarca.

La selección búlgara juega en Malta, colista del grupo B, pero después se la jugará con dos rivales directos: visita a Armenia y recibe a la República Checa el 15 de octubre en Sofía, en lo que se antoja el partido decisivo por esa segunda posición.