"¡Queremos una Nicaragua libre, libertad para los presos políticos!", demandaron este jueves miles de manifestantes al presidente Daniel Ortega durante una protesta en la capital, bautizada "¡Vamos ganando!", que se desarrolló pese al asedio policial.

"Pedimos el cese la represión, la libertad para todos los detenidos y que se vaya" Ortega del gobierno, dijo a la AFP un manifestante con el rostro cubierto, que se identificó como Ramón. 

La marcha "¡Vamos ganando!", convocada por la opositora Alianza Cívica por la Justicia la Democracia y otros movimientos sociales, se realizó en homenaje a las protestas que desde abril exigen la salida del mandatario y cuya represión ha dejado más de 320 muertos.

Los opositores piden la renuncia de Ortega, en el poder desde el 2007, y que se adelanten a 2019 las elecciones de 2021.

Cientos de antimotines y sandinistas se concentraron temprano en la rotonda de la capital de donde debía comenzar la marcha.

"¡Terroristas, golpistas, delincuentes!", insultaron los sandinistas a los opositores.

"El gobierno dice que somos unos terroristas y unos vandálicos, pero la verdad es que estamos luchando por una democracia", dijo a la AFP Sandra Rivera, una ama de casa de 30 años que portaba la bandera nacional.

Los opositores, entre ellos adultos, jóvenes y niños, hicieron caso omiso a la provocación y emprendieron la marcha por los barrios del este de la capital. "¡No tenemos miedo!", gritaron.

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En el camino se fueron uniendo más pobladores, mientras otros salieron a las puertas de sus casas para saludar a los manifestantes con la mano en el corazón o con las banderas de Nicaragua, con la que muchos expresan su rechazo a la bandera roja y negra del gobernante Partido Sandinista.

"Queremos un país libre, fuera la dictadura, aunque no podamos ir a la marcha la apoyamos de corazón", dijo a la AFP Rosa Mendoza, desde una tienda comercial.

A la protesta se unieron artistas que amenizaron la caminata con marimbas, otros escribieron las paredes con leyendas como "Estado asesino, fuera Ortega", mientras otro portaban globos con escritos como "llevamos más de 300 muertos" o "Nicaragua sigue en lucha".

La marcha se extendió varios kilómetros más de lo previsto, pese a la presencia de antimotines que siguieron a los manifestantes a bordo de camionetas, sin que se registraran incidentes.

Los opositores también exigieron la liberación de más de 300 nicaragüenses que están presos por oponerse al gobierno.

Rebeca Montenegro, de 45 años, caminó bajo el intenso sol con la foto de su hija Elsa Valle, una universitaria presa desde julio.

"A mi hija la torturaron, la tienen en una celda donde hay cucarachas, ratones, pulgas y zancudos", contó la mujer a la AFP.