El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, intentó convencer al público estadounidense el martes por la noche de que su prometido muro de USD 5.000 millones a lo largo de la frontera entre su país y México es vital para defender la seguridad nacional del país e intentó culpar a los demócratas por el actual cierre parcial del gobierno.
Durante un discurso desde la Oficina Oval, Trump replicó muchos de sus puntos de pronunciamientos anteriores, afirmando que Estados Unidos enfrenta una "creciente crisis humanitaria y de seguridad” en la frontera sur y que el país se enfrenta a “una crisis del corazón y del alma”.
A pesar de prometer que estaría orgulloso de “asumir las responsabilidades” de un posible cierre del gobierno por la búsqueda de la financiación para el muro, Trump culpó a los demócratas por el actual punto muerto.
“El gobierno federal permanece cerrado por una razón y una sola razón: porque los demócratas no financiarán la seguridad fronteriza”, criticó el mandatario. “La única solución es que los demócratas aprueben un proyecto de ley de gasto que defienda nuestra frontera y reabra nuestro gobierno”.
Los demócratas respondieron pronto a las acusaciones del presidente.
Dirigiéndose a la nación poco después del discurso del presidente, el líder de la minoría del Senado, Chuck Schumer, dijo que Trump “solo usó el telón de fondo de la Oficina Oval para fabricar una crisis, avivar el miedo y desviar la atención de la agitación en su administración”.
“El presidente de Estados Unidos, al no haber logrado que México pague por su ineficaz e innecesario muro fronterizo e incapaz de convencer al Congreso o al pueblo estadounidense de pagar la factura, ha cerrado el gobierno”, aseveró Schumer, acompañado por la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
El discurso del presidente y su rápida refutación se produjeron mientras el cierre parcial del gobierno se extiende a su tercera semana y los efectos continúan aumentando en todo el país. Se han acumulado residuos en los parques nacionales, las principales instituciones culturales financiadas por el gobierno están cerradas y algunas personas que solicitan préstamos hipotecarios que requieren documentos federales tienen retrasos.
Aproximadamente 800.000 trabajadores federales están siendo obligados a trabajar sin paga o están sin trabajo.
Muchas agencias gubernamentales se quedaron sin fondos el 22 de diciembre.
Inicialmente, Trump prometió en la campaña electoral que México pagaría directamente por su muro fronterizo, pero luego de enfrentar un rechazo rotundo de los funcionarios mexicanos, intentó disputarlo en un acuerdo comercial recientemente negociado, sin tener éxito.
Trump planea visitar la frontera sur este jueves en un viaje en el que se espera que promueva su caso para que los contribuyentes financien el muro.