EL PRESIDENTE de Estados Unidos, Donald Trump, rompió nuevamente el consenso internacional al haber reconocido la soberanía de Israel sobre los Altos del Golán, durante la conferencia anual del Comité de Asuntos Públicos Americano Israelí.
Llama la atención el momento en el que fue pronunciado este reconocimiento, dado que las elecciones legislativas en Israel son este 9 de abril, en las que Benjamín Netanyahu, primer ministro de este país, compite con estrecho margen de diferencia, con Benny Gantz. Y aunque Trump declaró que esta decisión unilateral no tiene nada que ver con la posible reelección de Netanyahu, el momento y lo que implica dicha decisión, tiene consecuencias políticas.
Trump también sacó provecho de este reconocimiento para beneficiarse en las elecciones de 2020. Una vez más, este Presidente muestra que ya inició una campaña para su reelección. Pero, ¿por qué se toma la decisión en este momento? ¿Qué incidencia tiene el reconocimiento de este territorio bajo control israelí?
Respaldo a Netanyahu
Los Altos del Golán son una alta meseta de 1.200 kilómetros cuadrados que se ubica a 60 kilómetros de Damasco, la capital de Siria y del cual Israel se apropió en la guerra árabe-israelí de 1967. La comunidad internacional, incluyendo a Estados Unidos, consideraba a este territorio como ocupado, con base en las leyes del derecho internacional. Aun así, se estima que hay 30 asentamientos judíos en los que viven unas 20.000 personas y también unos 20.000 sirios, de acuerdo con la BBC.
Comenta Zachary Laub en el centro de pensamiento, Consejo de Relaciones Exteriores, que su importancia radica en la ventaja de controlar un territorio alto y plano y aprovechar las reservas de agua dulce provenientes del mar de Galilea. Así mismo, “la guerra civil en Siria desde 2011 le ha dado a los Altos del Golán una nueva importancia estratégica para Israel. Como el poder del presidente Bashar al-Assad parecía tenue, se unió a Irán y a Hezbolá, el movimiento chií libanés, para asegurar la supervivencia de su régimen”, afirma Laub.
Pero más allá de ser un territorio que le permite a Israel controlar la presencia de Irán en la región, es también un objetivo político para los israelíes y especialmente para el primer ministro Netanyahu. Teniendo en cuenta que la próxima semana son las elecciones del Knesset, el parlamento de Israel, y que Estados Unidos es su mayor aliado en esta región, el reconocimiento le supuso una ventaja a Netanyahu después de ser acusado por hechos de corrupción y que tenían en la cuerda floja su reelección.
“Se predice que ambos, el partido Likud del primer ministro, Benjamín Netanyahu, y el partido Lavan de Benny Gantz, tendrán 30 de las 120 sillas del Knesset”, comenta el diario Haaretz con base en la última encuesta de opinión del jueves publicada por el canal 13 de noticias. Si bien el margen de diferencia es muy estrecho, el 51% de los encuestados piensa que Netanyahu es la mejor opción como primer ministro, mientras que Gaantz solo obtiene un 36%. Además, esta encuesta reveló que el “51% dijo que el reconocimiento de la soberanía de Israel sobre los disputados Altos del Golán, mejora la posición de Israel en la comunidad internacional, mientras un 34% piensa que no”, menciona el diario Haaretz.
Beneficio propio
Además de favorecer a su aliado y a su amigo cercano, como llamó Netanyahu a Trump, el Presidente de Estados Unidos también se beneficia ampliamente de la decisión tomada. Comenta Joe Macaron en Aljazeera que, aunque la comunidad judía en Estados Unidos solo representa alrededor del 3% del electorado estadounidense, Trump quiere asegurar el voto de los cristianos evangélicos que marcan el 25% de la población de Estados Unidos y que apoyan el Sionismo (movimiento que respalda la creación y existencia del Estado de Israel).
Además, Trump dijo que los demócratas “son totalmente anti-israelíes”. “La Casa Blanca está alimentando a propósito una narrativa de que el compromiso de los Demócratas con Israel es vacilante y que hay signos crecientes de lo que un exayudante de campaña de Trump ha llamado ‘Jexodus’, el supuesto éxodo de judíos estadounidenses del campo Demócrata, que han tradicionalmente apoyado al Republicano”, dice Macaron en Aljazeera. La retórica y las decisiones del Presidente de Estados Unidos han contribuido a que la comunidad judía cambie su apoyo de partido, aun cuando uno de los candidatos Demócratas a las elecciones de 2020, Bernie Sanders, pertenece a dicha comunidad.
Las movidas políticas de la comentada decisión, evidencian un mutuo beneficio para la búsqueda de reelección de Netanyahu y de Trump. Pero para la comunidad internacional crea un precedente en el que Estados Unidos avala la ocupación de un territorio no reconocido por el derecho internacional y en el que se “apoya” una ocupación, como por ejemplo, la de Rusia en Crimea. Como dijo el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, las condiciones no cambian porque este reconocimiento unilateral carece de efecto jurídico para Israel de administrar este territorio. Sin embargo, Israel tiene asentamientos y presencia militar en los Altos del Golán desde hace muchos años. Ahora la mayor preocupación es una posible escalada del conflicto en Medio Oriente y que la paz sea más lejana que antes.
(*)@nataliamarinop