La presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, ha anunciado la eliminación de tres ministerios y dos embajadas para aumentar los fondos destinados a la lucha contra la pandemia de coronavirus en la nación andina.
En concreto, a partir de ahora, los ministerios de Deporte y Cultura pasarán al Ministerio de Educación, mientras que el de Comunicación dependerá de la Presidencia. "Todo el dinero que se obtenga de esa reducción irá para salud y para luchar contra el virus", informó Áñez el jueves, según recoge la prensa boliviana.
Asimismo, el Gobierno boliviano cerrará sus embajadas de Irán y Nicaragua. "No tenemos nada contra esos países, pueblos nobles y hermanos que respetamos y son amigos, pero la decisión tiene el objetivo de ahorrar e invertir ese ahorro en salud y contra la COVID-19", explicó.
Además, reveló que ha ordenado al gabinete ministerial una revisión "al detalle" de "todos los cargos innecesarios y todos los gastos absurdos que inventó el Movimiento al Socialismo (MAS) y eran puro despilfarro".
La eliminación de los ministerios de Cultura y Deporte ha suscitado las críticas de la oposición. Para el ex presidente Evo Morales, "eliminar el Ministerio de Culturas es desconocer la diversidad e identidad cultural de 36 pueblos originarios como factores estratégicos de la plurinacionalidad". "Es negar el valioso aporte del movimiento cultural boliviano al desarrollo del país y su lucha por un ministerio", se ha quejado en Twitter.
El también ex presidente y ahora opositor Carlos Mesa ha reprochado que Áñez haga estos recortes cuando "en plena pandemia destinó 506 millones de bolivianos (unos 65 millones de euros) para la seguridad por encima de la salud". "Cultura y deportes son actividades esenciales, si se quiere eliminar gastos innecesarios ¿por qué no se reduce el gasto en publicidad?", ha planteado en la red social.
En la misma línea se ha expresado el candidato presidencial Luis Fernando Camacho, para quien "la reducción de ministerios es un parche propagandístico más que no soluciona problemas de fondo", por lo que ha propuesto "que destinen los 312 millones de bolivianos (unos 40 millones de euros) de la publicidad estatal para la lucha contra la COVID-19". "¡Demuestren responsabilidad con la gente que sufre!", ha espetado al Gobierno en Twitter.
Áñez ha contestado a las críticas por la misma vía asegurando que "se impulsarán el arte y la cultura desde el Ministerio de Educación". "Además, seguiremos con los programas vigentes y abriremos nuevos para sostener arte y cultura en la pandemia", ha añadido.
Caso respiradores
Por otra parte, la mandataria boliviana se refirió en su comparecencia del jueves al caso de los 170 respiradores adquiridos con un presunto sobrecoste y ha asegurado que quiere "dar la cara" y que no tiene "nada que esconder".
"Quiero pedir una disculpa de todo corazón. De verdad lamento muchísimo este tema y comparto la indignación que todos ustedes sienten", afirmó, al tiempo que remarcó que el Gobierno está "pendiente" de la investigación en curso.
En este contexto, prometió "impulsar todo el peso de la ley contra los que cometan corrupción, le toque a quien le toque", y que trabajará "sin descanso" para que los bolivianos "no pierdan un solo centavo por corrupción".
En este sentido, anunció que ha dispuesto que "toda compra de su Gobierno sea pública y que cualquier ciudadano pueda consultar y obtener información" a este respecto. Áñez ya ordenó una auditoría de todas las compras gubernamentales para el sector salud. "Quiero ver cada número y voy a hacer público cada número", aseveró.
"Esto aún no termina"
En referencia a la pandemia del coronavirus, insistió en que Bolivia vivirá "tiempos muy difíciles" y subrayó que, sin la cuarentena decretada para frenar el avance de la COVID-19, la situación sería peor en el país. Así, pidió a los bolivianos mantenerse como hasta ahora porque "esto aún no termina".
Bolivia ha superado los 12.000 casos de coronavirus tras contabilizar más de 600 en las últimas 24 horas, lo que confirma la tendencia ascendente de la curva de contagios mientras la nación andina avanza en la desescalada.