Sin embargo, el presidente Ortega dijo que ofreció liberar a quienes fueron capturados durante las protestas antigubernamentales
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, develó este sábado su agenda para las negociaciones con la oposición, en la que descartó adelantar las elecciones de 2021, ofreció liberar a detenidos durante las protestas antigubernamentales y pidió a la comunidad internacional suspender sanciones contra el país.
En un comunicado, el gobierno negó una vez más el adelanto de las elecciones generales que ha planteado la oposición y aseguró hacer sus planteamientos de cara a la negociación "tomando en cuenta que las elecciones presidenciales y legislativas están establecidas para el 2021".
En cambio, propuso fortalecer el tribunal electoral e implementar "las propuestas de reformas (...) que perfeccionen procesos electorales, libres, justos y transparentes", recomendados por la Organización de Estados Americanos (OEA).
La propuesta de agenda también ofrece fortalecer las libertades y derechos, pedir a la comunidad internacional que no aplique sanciones al país y liberar a detenidos en las protestas antigubernamentales que estallaron en abril de 2018, dejando unos 325 muertos, 600 presos y miles de exiliados.
Sobre la liberación de detenidos, el comunicado detalló que se trataría de aquellos "que aún no han sido juzgados", mientras que en el caso de los ya juzgados "se revisarán sus expedientes" para no generar "impunidad".
El gobernante también apuntó que se hará un llamado de apoyo a la comunidad internacional para "la implementación de los acuerdos finales de la negociación" y para "suspender toda sanción en contra del pueblo nicaragüense".
La propuesta de agenda del gobierno para la mesa de negociación con la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) fue divulgada en momentos que hay un "impasse" en el proceso de pláticas que busca ponerle fin a la crisis que vive el país desde el año pasado.
El viernes, el episcopado de Nicaragua rechazó participar en el diálogo entre el gobierno y la oposición, y los mismos miembros de la coalición opositora -que agrupa a estudiantes, campesinos, empresarios y sociedad civil- dijeron que reconsiderarían si continúan con las pláticas.
Esto ocurrió luego de que durante ocho jornadas de trabajo la delegación oficial no diera a conocer sus intenciones en este proceso de negociación, lo que provocó dudas sobre la verdadera voluntad del gobierno a superar la crisis política.
Las pláticas se reanudaron el 27 de febrero, en momentos que el gobierno enfrenta problemas financieros y encara sanciones de Estados Unidos que le impedirán acceder a créditos de organismos multilaterales.
Las protestas antigubernamentales que detonaron la crisis comenzaron el 18 de abril del año pasado contra una reforma a la seguridad social, pero ante la violenta represión oficial, que provocó muertos, devinieron en la demanda de renuncia de Ortega.