El nuevo coronavirus ha infectado a casi 47 millones de personas en todo el mundo y se ha cobrado 1,2 millones de vidas, según un balance realizado ayer a partir de cifras oficiales, que se considera son inferiores a las reales.
Europa es hoy la región donde el virus avanza más rápido, lo cual obliga a los gobiernos a buscar la manera acertada de limitar contactos y frenar las infecciones. Una complicada operación de equilibrista porque tampoco se quiere frenar la actividad económica ni multiplicar el descontento social, que ya ha provocado manifestaciones contra los confinamientos en diversos países.
Confinamiento en Viena
En Austria, un reconfinamiento comenzó ayer y estará en vigor al menos hasta finales de noviembre. En Grecia, Atenas y las regiones del país que más infecciones registran deben respetar un reconfinamiento desde ayer, una decisión que choca con la impotencia y críticas de numerosos sectores, comenzando por los propietarios de restaurantes y bares.
"Los restaurantes son el último lugar en el que el virus se puede propagar porque se respetan las distancias y las medidas de seguridad", dijo Maria Maniaki, empleada de un bar en el barrio de Monasteraki en Atenas. "Sin embargo en los transportes públicos y las iglesias no se respetan. Ellos tendrían que haber cerrado", agregó.
En Alemania, la canciller Angela Merkel pidió a los ciudadanos que respeten las reglas para frenar los récords diarios de contagios.
"Está en manos de cada uno que este mes de noviembre sea un éxito común" afirmó la jefa del gobierno, advirtiendo desde ya que las fiestas de Navidad serán muy restringidas.
Test masivos en Liverpool
En Inglaterra, la ciudad de Liverpool, una de las más afectadas por el covid-19, pondrá a prueba un programa de testeo masivo que podría extenderse al resto del país, anunció el gobierno británico ayer.
A partir del viernes, se ofrecerá al más de medio millón de personas que viven o trabajan en la ciudad la posibilidad de realizar con regularidad estos test de resultado rápido.
Esta operación masiva comenzará un día después de que toda Inglaterra entre en un segundo confinamiento de cuatro semanas anunciado el sábado por el primer ministro Boris Johnson.
"Estas pruebas ayudarán a identificar a los miles de personas en la ciudad que no tienen síntomas pero que pueden infectar a otros sin saberlo", anunció Johnson en un comunicado.
En Italia, se dieron a conocer ayer las condiciones de un toque de queda nocturno nacional así como otras restricciones para los viajes. Italia ya ha cerrado cines, teatros, gimnasios y piscinas y los bares y restaurantes no pueden recibir clientes después de las seis de la tarde.
"Sigamos unidos en este momento dramático", pidió el lunes el jefe de gobierno, Giuseppe Conte, después de que manifestantes que protestaban contra estas restricciones se enfrentaran a la policía el sábado en Roma.
España sin turistas
En Francia, hubo 418 muertos por coronavirus en las últimas 24 horas y más de 52.000 nuevos casos. El país está desde la semana pasada bajo un confinamiento que aún no ha tenido un impacto positivo en los balances diarios de la pandemia.
Según el consejo científico que asesora al gobierno francés, la segunda ola de la epidemia no será la última, puesto que le seguirán nuevos episodios "sucesivos durante el final del invierno" y la primavera.
España, uno de los países más afectados por la pandemia y segundo destino turístico mundial recibió un 75% menos de visitantes extranjeros en los nueve primeros meses de este años, debido al covid-19.
Entre enero y septiembre, hubo 16,8 millones de turistas, frente a los 67 millones del mismo período de 2019, indicó en un comunicado el Instituto Nacional de Estadística.