JOHN Bolton, exasesor de seguridad nacional del presidente Donald Trump, ha dado a conocer el polémico libro “The Room Where it Happened” (La habitación donde sucedió) en el que hace acusaciones al mandatario estadounidense y lo critica por su, para él, desastrosa gestión al frente de la Casa Blanca.
Más allá de los supuestos descubrimientos del texto, tras algunos días de su difusión, ya han empezado a conocer reacciones y al parecer la mayor revelación es la de que su autor es un gran estratega… para las ventas y ha logrado posicionar un tedioso libro que está lleno de impresiones y falsedades.
A pesar de que el Gobierno intentó que se prohibiera su distribución por representar un riesgo para la seguridad nacional de los Estados Unidos, ya se encuentra en las librerías pues el juez Royce Lambert consideró que, aunque efectivamente era un riesgo, era demasiado tarde para emitir una orden de restricción, puesto que el texto ya tenía una gran difusión.
Pese a negarse a parar la publicación, el juez Lambert sugirió que Bolton podría perder los dos millones de dólares que había recibido por escribir el libro, por haber incumplido acuerdos de confidencialidad con la administración, si el gobierno presenta una acción judicial separada de la causa inicial.
“El gobierno quiere que Bolton sea considerado como obligado a respetar esos acuerdos y asegurarse de que no reciba ningún beneficio de su vergonzosa decisión de situar su deseo de dinero y atención por encima de su compromiso de proteger la seguridad nacional”, dijo en su momento un vocero de la Casa Blanca.
El presidente Trump reaccionó casi de inmediato y resaltó el fallo diciendo que "Bolton violó la ley y ha sido llamado y reprendido por hacerlo, con un precio realmente alto a pagar", y calificó el libro como “pura ficción”.
Reacción de Turquía
Las autoridades turcas denunciaron que el polémico libro del exconsejero incluye informaciones “engañosas y manipuladas” sobre el presidente Recep Tayyip Erdogan.
Bolton afirma en su libro que el presidente turco se quejó por la investigación judicial contra el gran banco turco Halkbank en Estados Unidos, sospechoso de violar las sanciones que ha impuesto Washington contra Irán. Según el escrito, Trump habría garantizado a Erdogan “que se encargaría del asunto” y que concretamente el mandatario estadounidense habría explicado que los fiscales a cargo del caso fueron elegidos por su predecesor, Barack Obama, pero que él podría reemplazarlos y así lo haría.
En un comunicado, el director de comunicación de la presidencia turca, Fahrettin Altun, dijo que el libro de Bolton contiene “afirmaciones engañosas, sesgadas y manipuladas” de las conversaciones entre los dos mandatarios.
“Está claro que estas distorsiones y mentiras están provocadas por razones políticas personales”, dijo Altun, quien aseguró que los dos líderes se han esforzado por “arreglar” las relaciones bilaterales pese a sus diferencias en temas como la guerra en Siria.
Reacción de Corea del Sur
Por su parte la oficina de la presidencia de Corea del Sur acusó al exasesor de seguridad nacional estadounidense, de distorsionar los hechos y poner en peligro las futuras negociaciones con su relato sobre las cumbres entre Donald Trump y Kim Jong Un.
Bolton dice que el mandatario estadounidense y el presidente surcoreano Moon Jae-in gestionaron los históricos encuentros con el líder norcoreano Kim Jong Un.
Chung Eui-yong, asesor de seguridad de Moon, que aparece en múltiples ocasiones en el libro, dijo que el texto “no expresa de forma precisa los hechos y una gran parte de él distorsiona mucho los hechos”. Asimismo afirmó que los detalles revelados sobre las negociaciones nucleares bilaterales “violan los principios básicos de la diplomacia y podrían dañar seriamente las futuras negociaciones”.
A este respecto La Casa Azul, la presidencia surcoreana, emitió un comunicado por separado, señalando que es “inapropiado distorsionar los hechos con prejuicios y sesgos”. Y desestimó las percepciones del exasesor en el sentido de afirmar que actuaciones de Moon eran todo un “fandango diplomático, eran una creación de Corea del Sur, más relacionada con su programa de 'unificación' que con una estrategia seria para Kim o nosotros”.
Caso Ucrania
Bolton fue aún más allá y respaldó las acusaciones contra el presidente Trump sobre la supuesta presión ejercida ante Ucrania para sacar a luz información que perjudicara a Joe Biden, su rival demócrata en la carrera por la reelección.
Al Mandatario, fue objeto de un juicio político en su contra por abuso de poder (se le acuso de retener 391 millones de dólares en ayuda destinada a Ucrania) y de obstrucción al Congreso, ambos derivados de este esta acusación, pero fue absuelto por la cámara alta del congreso de su país que no vio mérito para su destitución como pretendían algunos opositores de la Cámara. El mandatario norteamericano calificó como una victoria la votación del “impeachment” y agregó que podría “regresar a los asuntos del pueblo estadounidense”.
Reacciones de la Casa Blanca
El jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Mike Pompeo, se pronunció sobre la publicación y calificó a John Bolton de traidor y agregó que el exasesor de seguridad “está difundiendo una serie de mentiras, medias verdades” y falsedades absolutas. Pompeo sostuvo en un comunicado que “es triste y peligroso que el papel público final de John Bolton sea el de un traidor que dañó a Estados Unidos al violar su sagrada confianza con su gente”, y remató enviando el siguiente mensaje “a nuestros amigos alrededor del mundo: ustedes saben que el Estados Unidos del presidente Trump es una fuerza para el bien del mundo”.
El presidente Trump descalificó el libro de memorias de su exconsejero y afirmó que “el libro de Bolton, que está recibiendo pésimas críticas, es una compilación de mentiras y de historias inventadas para hacerme quedar mal. Muchas de las declaraciones ridículas que me atribuye nunca existieron”, dijo el mandatario en su cuenta de Twitter.
Considerando las afirmaciones de Bolton es de esperar que otros gobiernos las desmientan y que en futuro se aclaren situaciones distorsionadas por el exasesor en temas como su incapacidad para poner fin al régimen de Maduro en Venezuela.