El presidente electo de Estados Unidos, Joe Biden, anunció el martes la nominación del general Lloyd Austin como secretario de Defensa, un nombramiento que describió como "necesario" e "histórico".
Si la designación recibe la luz verde del Senado, Austin, de 67 años, será la primera persona negra en liderar el Pentágono, una institución donde las minorías están fuertemente representadas en las bases pero aún no en la cima.
Este general retirado del ejército, que luchó en Irak y Afganistán antes de convertirse en el primer hombre de color en liderar el Comando Central del Ejército de Estados Unidos (Centcom), "está excepcionalmente calificado para asumir los desafíos y las crisis que enfrentamos actualmente", escribió el presidente electo demócrata en un comunicado.
"El general Austin comparte mi profunda convicción de que nuestro país es más fuerte cuando lidera no solo con el ejemplo de nuestro poder, sino también con el poder de nuestro ejemplo", agregó Biden.
"Una personalidad brillante y respetada, figura pionera en la historia del Ejército de Estados Unidos, el secretario designado Austin se retiró del Ejército en 2016 después de más de 40 años de servicio en la defensa de Estados Unidos", subrayó el comunicado.
Renuencia
Según una fuente cercana al equipo de transición citada por CNN, los dos hombres también forjaron vínculos personales a través del hijo de Biden, Beau, golpeado por el cáncer en 2015 después de haber peleado en Irak bajo las órdenes del general Austin.
Beau Biden y Lloyd Austin se hicieron amigos, dijo esta fuente a CNN. "Iban juntos a misa y se sentaban uno al lado del otro casi todos los domingos", contó.
Graduado de la prestigiosa academia militar de West Point, el general Austin se retiró en 2016, antes de pasar a la industria de defensa, como muchos de sus predecesores. Es miembro de la junta directiva de Raytheon Technologies.
Pero su confirmación por parte del Senado no es segura: desde que aparecieron los primeros informes de prensa sobre su posible nombramiento, se alzaron voces lamentando la elección de un exmilitar para supervisar un ejército estadounidense a veces acusado de tener demasiada influencia.
El Congreso de Estados Unidos, que mantiene el control civil sobre los militares, ha adoptado regulaciones que estipulan que un exmilitar debe estar retirado durante más de siete años para convertirse en secretario de Defensa.
Como este plazo no sería respetado con Austin, el Senado debería otorgarle una exención. Lo hizo en 2016 con el exgeneral de los marines Jim Mattis, pero bajo protesta. Y entre los que votaron en contra de la exención se encontraban varios nombres importantes del Partido Demócrata, incluidos los candidatos en las primarias demócratas Bernie Sanders, Elizabeth Warren y Cory Booker.
Varios senadores demócratas ya han anunciado el martes que se opondrán, como el influyente legislador de Connecticut Richard Blumenthal y el representante de Virginia Tim Kaine.
"Historia"
En una columna publicada el martes por la revista The Atlantic bajo el título "Un secretario de Defensa experimentado, necesario e histórico", Biden trató de calmar la controversia.
"Respeto y creo en la importancia del control civil sobre nuestro Ejército", dijo.
Pero "espero que el Congreso otorgue una exención al secretario designado Lloyd Austin, como lo hizo con Jim Mattis".
"Dadas las inmensas y urgentes amenazas y desafíos que enfrenta nuestra nación, debe ser confirmado rápidamente", agregó.
Biden, de 78 años, y la futura vicepresidenta, Kamala Harris, de 56, la primera mujer y la primera persona negra en ocupar el cargo, han prometido un gobierno que "se parezca a Estados Unidos" en toda su diversidad.