A diferencia de lo ocurrido hace una semana en los caucus de Iowa, en New Hampshire las encuestas coincidieron con los resultados de las primarias, poniendo en primer lugar de la larga carrera por la nominación al veterano senador Bernie Sanders y asestando un nuevo revés para el exvicepresidente Joe Biden.
Aunque de antemano el mismo Biden había admitido que iba a perder en la cita electoral de ayer en ese estado, ni él ni nadie esperaban que su debacle fuera de tal magnitud.
Al cierre de esta edición (10 de la noche), escrutado casi el 50% de las mesas, el otrora favorito demócrata solo llegaba al 8,6% de los votos, en quinto lugar por detrás de Elizabeth Warren que sumaba 8.5% y más que triplicado por el triunfador de la jornada, el senador de Vermont, Bernie Sanders, que recogía un 28% de apoyo electoral
En segundo lugar se encasillaba el joven exalcalde de South Bend, Indiana, con un 23%, y le seguía la senadora de Minnesota, Amy Klobuchar con un 20%.
Como se esperaba, los resultados de esta segunda cita demócrata comenzaron a decantar la lista de los 11 aspirantes. Una vez comenzó el conteo, dos de ellos anunciaron su retiro. Fueron Andrew Yang y Michael Bennet por los pobres resultados, ya que ninguno superó el 1% en ninguna de las dos jornadas.
Pero no solo las primarias de este estado de 1,3 millones de habitantes fueron un cantado golpe –inclusive lo había vaticinado el pasado viernes- para el que hasta hace unos meses era el favorito de los líderes demócratas para alzarse con la investidura presidencial partidaria. Un nuevo y más preocupante recibió, también ayer, Joe Biden: fue superado en las encuestas que a nivel nacional se hacen sobre las preferencias electorales, poniendo fin a más de un año de hegemonía.
Según una encuesta de la Universidad de Quinnipiac, realizada a nivel nacional entre el 5 y el 9 de febrero, Sanders tiene un 25% de intención de voto, ocho puntos porcentuales más que Biden (17%) y un sorprendente tercer lugar para el multimillonario y exrepublicano alcalde de Nueva York Michael Bloomberg, que logra un 15% de apoyo.
.En cuarto lugar se ubica la senadora progresista Elizabeth Warren (14%) y luego el joven exalcalde Pete Buttigieg (10%), que ha aumentado su caudal desde su muy ajustado triunfo en las caóticas primarias de Iowa del 3 de febrero.
Sorprende el tercer lugar del ahora candidato independiente, ya que como se sabe no hizo campaña para los caucus de Iowa ni para New Hampshire, porque según ha señalado concentra su ofensiva en anuncios publicitarios para el “Súper Martes” del 3 de marzo donde están concentradas las primarias de 15 estados.
Al respecto, y tal como lo cita el diario El Comercio, Tinm Malloy de la Universidad de Quinnipiac señala que “el cuarto puesto de Biden en Iowa ha erosionado claramente lo que fue su mayor fortaleza: la percepción de que él era el mejor situado para derrotar a Donald Trump”.
De igual forma resaltó que “Sin pisar Iowa o New Hampshire la sombra (de Bloomberg) flota ahora por encima de las primarias”.
La otra encuesta, que confirma la caída de Biden, fue la realizada por la Universidad de Monmouth que resalta que Sanders saca, en sondeo nacional, 10 puntos de ventaja a Biden, logrando 26% contra 16%.
La misma ubica en tercer lugar y con empate técnico a Buttigieg y Warren con 13%, mientras Bloomberg logra 11%, marcando sostenido ascenso.
Las primarias de anoche en New Hamsphire eran un termómetro clave para Biden y tras los resultados, con un impensable quinto lugar, se verá forzado -si quiere cumplir su promesa de que independiente de los resultados de estas jornadas iniciales no abandonará la carrera- a darle un vuelco a la campaña y enfocar todos sus esfuerzos en las que vienen y especialmente en el Súper Martes del 3 de marzo.
Sin embargo muchos líderes demócratas comienzan a dudar de la viabilidad de la candidatura del exvicepresidente de Barack Obama, quién sin embargo se mostró confiado en confía mejorar su desempeño en Nevada la próxima semana y en Carolina del Sur el 29.
Los demócratas dieron en las urnas ayer un claro respaldo al senador de izquierda Bernie Sanders, como lo vaticinaban las encuestas y ratificaron el desafío que sobre el veterano senador mantiene el joven exalcalde gay Pete Buttigieg,
Las urnas abrieron temprano en este estado del noreste de Estados Unidos con apenas 1,3 millones de habitantes, que tiene un peso importante en las elecciones y que podría reducir el número de aspirantes a la nominación demócrata, tras los resultados que confirman los que verdaderamente tienen chance de pelear por la candidatura partidaria.
La localidad de Dixville Notch, de cinco habitantes fue, como ya es tradición, la primera en votar en New Hampshire, un minuto después de la medianoche. "Tenemos cierto orgullo de estar aquí", dijo Tom Tillotson, encargado de la votación.
"Nos tomamos esto con seriedad", dijo a la AFP. "Nos sentimos honrados de ser... básicamente el pistoletazo de salida para el proceso electoral primario".
Sorpresivamente, el millonario Michael Bloomberg ganó en esta localidad con un voto republicano y dos demócratas. Buttigieg y Sanders obtuvieron un voto cada uno.
En el centro de votación instalado en un gimnasio de una escuela de Manchester, que abrió temprano en la mañana, decenas de personas depositaban sus papeletas en urnas ubicadas detrás de cortinas de plástico azules y rojas, adornadas con una imagen de la estatua de la Libertad.
Buttigieg, de camisa, corbata y un abrigado saco negro salió temprano a saludar a los votantes, con quienes se tomó selfies con un marco de paisajes nevados. También muy temprano y a través de twitter, el exvicepresidente Joe Biden urgió a la gente a salir a votar. "Hoy es el día". En ese momento no pensaba que el respaldo ciudadano le fuera a ser tan esquivo.
La interna demócrata comenzó a agriarse en las últimas semanas, bajo la mirada atenta de Trump, que ha sido reiterativo en sus críticas a los demócratas, especialmente con el fiasco de los resultados en Iowa.
El mandatario, que aspira a un segundo mandato en las elecciones del 3 de noviembre, estuvo anoche New Hampshire con un gran acto público en Manchester.
"Recuerden esto: los demócratas de Washington nunca han sido tan extremistas", lanzó a una entusiasta multitud.
"Estamos salvando su sistema de salud mientras los demócratas socialistas intentan quitarles su sistema de salud", agregó en un claro dardo contra Sanders.
En momentos en que la carrera demócrata comienza a decantarse, Sanders defiende su "revolución" política contra la desigualdad. "Lo que pase aquí va a tener enormes consecuencias", dijo temprano a sus simpatizantes en New Hampshire.
Así está, por lo pronto, la carrera demócrata por la presidencia tras surtirse las dos primeras etapas: Sanders picando en punta, pero como se dice popularmente ‘respirándole en la nuca’ el joven e inexperto Buttigieg. En un disputado tercer lugar, pero lejos de los anteriores hay ahora un duelo entre las senadores Warren y Klobuchar, mientras Biden se hunde y descolla -con fuerza-, el exalcalde Bloomberg.
Es temprano para apostar quién será el rival de Trump en las elecciones de noviembre como también para señalar si Biden opta por dar un paso al costado. Sin embargo, ya comienza a perfilarse un panorama claro de los que realmente tienen chance de llegar fuertes a la Convención Demócrata de julio. /