La polémica sobre la sede de la Contraloría no cesa, hoy la excontralora, Sandra Morelli  quien se marchó para Italia alegando falta de garantías por parte de la Fiscalía en los líos que la enredan por las presuntas irregularidades del contrato de arrendamiento donde opera la entidad, explicó que cuando se hizo el negocio siempre se pensó en el bien público y lo que inicialmente se buscaba era comprar el predio.

De igual maneral la exfuncionaria fue enfática y aseguró que cuando se planificó  la compra de la sede del edificio de Gran Estación II le consultó al presidente Juan Manuel Santos y él no tuvo ningún reparo.

Morelli reveló que ahora lo que buscan es evitar un control fiscal y así no tener que  darle una explicación a la Procuraduría. “Si usted no compra sencillamente no hizo la inversión, como está pasando ahora. Si lo compraba se volvía inversión. Esa es la salida lógica de un negocio complejo donde todo estaba hecho para beneficiar a la Nación” enfatizó la exfuncionaria.

El tema se ha dilatado durante las últimas semanas ya que el contrato se venció el 31 de diciembre por lo que los funcionarios del Órgano de Control no han tenido un lugar para ejercer sus funciones.La juez primera de ejecución de penas negó el recurso que solicitó el sindicato de la Contraloría argumentando que no hay certeza inminente que el traslado inmediato de los funcionarios  vulnere los derechos de los trabajadores.

Además la togada dijo que  los funcionarios tendrán 10 días para que  se trasladen del inmueble por lo que el próximo 13 de enero se conocería la decisión definitiva de la tutela.