Insurgentes sirios desean retomar el Saladino, en Alepo | El Nuevo Siglo
Viernes, 10 de Agosto de 2012

Los rebeldes sirios se organizaban el viernes para tratar de reconquistar el emblemático barrio Saladino en Alepo, pero el ejército regular proseguía su ofensiva y bombardeaba otros sectores en manos de los insurgentes.

 

Como todos los viernes desde que comenzó la revuelta en marzo del 2011, la oposición llamó a manifestar a la salida de las mezquitas contra el régimen sirio. En esta ocasión adoptaron la siguiente consigna: "Dadnos armas antiaéreas", para poder hacer frente a los bombardeos aéreos de las fuerzas gubernamentales.

 

Por otra parte, el ex ministro de Relaciones Exteriores de Argelia, Lakhdar Brahimi, de 78 años, se perfila para ser designado como nuevo enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria en sustitución de Kofi Anan, según fuentes diplomáticas.

 

En Alepo, los enfrentamientos continuaban el viernes en varias zonas del emblemático barrio Saladino, en donde la víspera los rebeldes procedieron a una "retirada táctico" frente a los intensos bombardeos del ejército regular sirio, según informó un jefe local de los rebeldes.

 

"Seguimos luchando en varias zonas de Saladino porque no abandonaremos este barrio", dijo a la AFP Husam Abú Mohamed, comandante de la brigada Deta Ashahba del Ejército Sirio Libre (ESL, formado básicamente por desertores del ejército regular y por civiles).

 

Mientras tanto, el ejército regular sirio continúa bombardeando Saladino (oeste) y otros barrios de Alepo, entre ellos Sahur y Hanano (noreste), indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

 

En el barrio de Hanano, cuatro bombas lanzadas por un avión MIG-21 cayeron hacia las 05H00 (02H00 GMT), la primera en el patio de la sede del ESL y la segunda en un edificio residencial dejando varios heridos, según periodistas de la AFP en el lugar.

 

Furiosos, los ocupantes de este edificio criticaron fuertemente a Estados Unidos y Francia, países que sin embargo respaldan a los rebeldes.

 

"Nadie nos ayuda", dijeron.

"Apoyamos al Ejército Sirio Libre pero es también culpa de todo lo que ocurre", opinó el dueño de uno de los apartamentos afectados.

 

El jueves en la noche, tras el retiro de los rebeldes sirios del barrio Saladino, Wasel Ayub, comandante de la brigada Nur al Haq del ESL, precisó que cinco batallones insurgentes seguían presentes en el barrio para facilitar la evacuación completa de los combatientes.

 

Ayub afirmó que los rebeldes "refuerzan" su "línea de defensa" al este de Saladino sobre la base de un arco que va de Sukkari, al sur de este barrio, a Bustan al Kasr, al norte, pasando por Mashhad en el centro.

Una fuente de seguridad afirmó que "el ejército avanza rápidamente en dirección a Seif al Dawla, pero la próxima batalla deberá ocurrir en Sukari", más al sur.

 

Según el OSDH la violencia en Siria dejó el jueves 191 muertos, entre los cuales 45 rebeldes y 39 soldados.

 

La situación humanitaria en Alepo, escenario de combates entre los rebeldes y el ejército, preocupa al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).

"Miles de personas abandonaron sus hogares y se encuentran refugiados en edificios públicos, utilizados ahora como refugios provisorios", indicó Marianne Gasser, jefa de la delegación del CICR en Siria, en un boletín.

 

La situación humanitaria preocupa especialmente al CICR porque "la Media Luna Roja Siria tuvo que suspender la mayor parte de sus actividades debido al peligro extremo existente sobre el terreno", añadió Gasser.

 

Más de 80 escuelas en diversas partes de la provincia de Alepo acogen a civiles que huyen de los combates, indicó el CICR, que aseguró haber asistido a más de 12.500 personas en todo el país en las últimas tres semanas pese al recrudecimiento del conflicto.