Denuncia porel delito de homicidio por omisión o culposo ante la Fiscalía presentaría el personero Ricardo María Cañón por la muerte de una paciente de 56 años que ingresó a la Clínica Palermo el sábado y murió 48 horas después.
Cañón reiteró que “es absurdo que la vida de las personas esté por debajo de un trámite administrativo”.
De acuerdo con el testimonio de Enrique Díaz, su esposa Esperanza Forero ingresó a la Clínica Palermo el sábado 4 de mayo por una crisis cardiaca.
Luego de ser estabilizada por los médicos, en el centro asistencial le exigieron un depósito en dinero, pero al no tener liquidez en ese momento tuvo que firmarles un pagaré para que siguieran con el procedimiento médico, explicó Díaz.
Después de una serie de exámenes practicados el domingo, los médicos le manifestaron que ella debía estar en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Acto seguido, les hizo saber a los funcionarios de la sección administrativa de la clínica que, aunque él tenía un atraso con su Entidad Promotora de Salud (EPS), por favor siguieran con el procedimiento indicado por los galenos ya que estaba de por medio la vida de su esposa.
Ellos le dijeron que debía trasladarla a otra UCI o, en caso contrario, debía dejar un depósito de 8 millones de pesos para que pudiera permanecer en la UCI de la Clínica Palermo.
Como Díaz no tenía dinero en ese momento les manifestó que él ya había firmado un pagaré. Sin embargo, le dijeron que le daban plazo hasta el día siguiente para que consiguiera el dinero.
En medio de su angustia, Díaz se puso al día con su EPS (Suramericana) y les llevó el paz y salvo a la clínica.
No obstante, le dijeron que la factura ya iba en 6 millones de pesos y que si no los cancelaba no podían trasladar a la señora a la UCI.
Según relata Díaz, a la señora le desconectaron líquidos y monitoreo y la dejaron en un área que no era la adecuada para una paciente en ese estado. “Una especie de cocina con algunos desechos médicos altamente peligrosos”, indicó.
Al ver esto, Díaz se dirigió a la sección administrativa de la clínica y les pidió que por favor trasladaran ya a su señora que se estaba poniendo muy mal y que, además, él ya había pagado en la EPS y también tenía firmado un pagaré.
La respuesta tajante, dice, fue que ellos no habían recibido ninguna notificación por parte de la EPS a su enlace operativo y que tocaba esperar.
“Mi señora entró en desesperación y trató de bajarse de la camilla en la que estaba y sufrió el infarto que le produjo la muerte instantánea”, afirmó Díaz. Forero murió esperando que un trámite administrativo le salvara la vida.
Ante esta situación, que se suma, entre muchas otras más a la de la niña de dos años Paula Sofía Lesmes, que falleció en días recientes en el Hospital Santa Clara, también por negligencia, el personero Cañón puntualizó que “de ser necesario presentará todas las acciones penales que se requieran para enfrentar este tipo de muertes previsibles y evitar que se queden en la impunidad”.