LOS SEIS ejes temáticos propuestos por Colombia para la VI Cumbre de las Américas fueron aprobados de manera unánime por los 34 países miembros que se encontrarán en Cartagena a partir de mañana.
Además de lograr organizar la Cumbre en esos seis temas, Colombia también logró que se aprobara una nueva metodología de negociación de los documentos finales con el objetivo de alcanzar compromisos que se vean reflejados en acciones concretas, realizables, medibles y con financiación asegurada.
Bajo el lema “conectando las Américas: Socios para la prosperidad”, se pretende proyectar al continente americano como un todo ante el resto del mundo, enviando un mensaje de unidad y de oportunidades a la comunidad internacional.
El papel protagónico de Colombia como anfitrión de la Cumbre es una congruente consecuencia de su actuación en los foros de integración y concertación regionales, sustentada, según se consignó en los balances elaborados por la Cancillería sobre su gestión en 2011, en la capacidad del país para proponer y liderar iniciativas que, al tiempo que corresponden con asuntos estratégicos nacionales, generan consenso y respaldo por parte de otros países de la región.
Por ejemplo, la Cancillería destacó el liderazgo del país para alcanzar el acuerdo político para que en ejercicio de la presidencia pro tempore de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), se lidere un proceso de reingeniería de la entidad que permita ajustar su institucionalidad y retomar su importancia en la integración latinoamericana.
El acuerdo alcanzado por Colombia para esta reingeniería, se produjo en una coyuntura importante, determinada, según la Cancillería, por el interés de algunos de los países miembros en reconsiderar su pertenencia al organismo, por el fortalecimiento de otras instancias regionales de integración y por la posible reducción de los recursos de cooperación que se han recibido.
Colombia logró con este acuerdo, mantener la vigencia de la CAN como importante mecanismo de integración en lo comercial, lo social, lo político y ambiental.
La Alianza del Pacífico para la conformación de un Área de Integración Profunda, junto con Chile, México y Perú, fue una iniciativa en la que el papel de Colombia ha sido determinante para que las condiciones internas de los demás socios no afectara el desarrollo del proyecto, el cual alcanzó en un período de sólo siete meses, reunir en dos oportunidades a los Presidentes y adoptar decisiones en torno a agendas y metas precisas, según la Cancillería.
En un plazo de dos años, la integración profunda deberá dar sus primeros frutos. La consolidación de este mecanismo permitirá al país en el mediano plazo, afinar más su estrategia de inserción en el Asia Pacífico.
Del mismo modo, se ha obtenido el apoyo para avanzar en el proyecto estratégico de interconexión eléctrica, en sus componentes mesoamericano y andino. En ambos casos, la Cancillería jugó un papel activo para asegurar el compromiso politico de los demás países parte, Panamá –en el caso mesoamericano- y de Ecuador, Perú y Chile para la interconexión andina.
Con los avances dados en ambos proyectos, en materia de regulación especialmente, Colombia consolida su papel de liderazgo en la promoción de la integración energética regional.
En el último año se logró mantener una presencia continua en las instancias de negociación de los 13 mecanismos de integración y concertación regionales a los que pertenece Colombia.
El nuevo papel del país en estos foros tuvo como reto, mantener y reflejar, en las distintas declaraciones políticas, las posiciones nacionales frente a cuestiones como las drogas, la seguridad y el terrorismo, que en su momento fueron de crítico manejo y llegaron a representar ciertas resistencias.
De la misma manera, se logró mantener la consistencia para asegurar que en temas sensibles, especialmente de carácter extra regional, se reflejaran de manera adecuada los intereses nacionales.
Colombia contribuyó a la construcción de consensos y se consolidaron alianzas importantes con otros países de la región, para asegurar que cada mecanismo concentrara sus agendas, declaraciones y aspiraciones en materia de integración.
Retos
Logística
En primer reto es el despliegue del propio Estado para procurar que todas las actividades funcionen coordinadamente.
Dentro del esfuerzo logístico, un punto importante es la atención a los medios de comunicación del continente que cubrirán la Cumbre.
Se calcula que al encuentro hemisférico asistirán entre 1.000 y 1.500 periodistas de los principales medios de comunicación del mundo. Las agencias internacionales de noticias y enviados especiales de los diarios, radioemisoras y cadenas de televisión ya registraron su participación en el certamen, relató Otto Gutiérrez, director nacional de comunicaciones de la IV Cumbre.
Seguridad
El vicealmirante Hernando Wills, supervisor de la estrategia de seguridad de la Cumbre, aseguró que la seguridad estará reforzada por un contingente especial de la Policía, especialmente destacado a las zonas urbanas aledañas a la zona donde se realizará la cita continental de Cartagena.
Según Wills, jefe de Operaciones Navales de la Armada, así no se descuidará la seguridad de los cartageneros.
Habrá tres centros de operaciones militares para blindar a los asistentes a la Cumbre. “Tendremos efectivos en los municipios aledaños a Cartagena un circulo de seguridad intermedio, con fuerzas militares y seguridad local, que tiene la responsabilidad más directa. Todo va a ser controlado en tres centros de operaciones”, explicó el almirante Wills.
Cuba
El clamor de los mandatarios miembros de la ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), pero también de otros líderes del continente para que esta fuera la última Cumbre sin Cuba pareció en algún momento ensombrecer el éxito de la cita hemisférica.
Finalmente, aunque Estados Unidos logró que no existiera el “consenso”, como diplomáticamente lo denominó en su momento el presidente Juan Manuel Santos, el tema ocupará un espacio en la agenda.
Ya el gobierno brasileño, con cuya líder Dilma Rousseff el presidente Santos se reunirá luego de la Cumbre, reiteró que esta debe ser la última cita continental a realizarse sin la participación de Cuba. “La posición de Brasil es que ésta debe ser la última Cumbre de las Américas sin Cuba”, afirmó el vocero de la Cancillería, el embajador Tovar Nunes.
También el presidente de Perú, Ollanta Humala, asistirá a la Cumbre con la intención de plantear que en las siguientes convocatorias se incluya a todos los países del continente, tal como lo referenció el canciller peruano Rafael Roncagliolo.
Sin embargo, hace tres años, después de la Cumbre realizada en Trinidad y Tobago, el entonces presidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva había manifestado: “No veo posibilidad de que haya otra Cumbre de las Américas sin Cuba, no hay más explicación para eso”.
Neutralidad activa
Precisamente la habilidad con que Santos logró sortear lo que hubiera podido ser un golpe muy fuerte a la Cumbre, ya sea por la ausencia de Obama o del colectivo de la ALBA, terminó siendo un exitoso fogueo del liderazgo que quiere imprimirle a su gestión a nivel internacional.
Solamente el presidente ecuatoriano Rafael Correa se excusó, no sin antes advertirle a Santos que su intención no era “ocasionar el más mínimo problema ni a su gobierno ni a nuestra querida Colombia”; por el contrario, le escribió que “deseamos, por el bien de la región y del mundo, que la Cumbre de Cartagena sea exitosa. El deseo de acompañarles es enorme, sólo superado por la firmeza de nuestras convicciones”.
Obama
Esta previsto que en la Cumbre los presidentes Santos y Barack Obama anuncien la puesta en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC).
“Esperamos que cuando venga el presidente Obama”, dijo hace unas semanas Santos, “vamos a ver si podemos anunciar ahí o muy pronto la implementación del acuerdo que todavía no está implementado”.
Eso implica que esta semana el Congreso pueda terminar el trámite del paquete legislativo. Difícil, mas no imposible.
Obama también asistirá a un acto de implementación de la ley de víctimas, informó la canciller María Ángela Holguín.
“El mismo presidente Barack Obama fue quien nos manifestó que quería participar con su presencia en el acto de la Ley de Víctimas y Tierras. Esto es una muestra fidedigna del apoyo del gobierno estadounidense a la implementación de dicha ley en el país”, aseguró Holguín.
Drogas
Santos ha reiterado que aunque el tema de la despenalización de las drogas no será el tema central en la Cumbre, sí se debatirá una crítica a la lucha antidrogas.
El presidente Santos le dijo la semana pasada a la revista brasileña Época que es necesario de hablar de la lucha contra las drogas y reconoció que el tema es “políticamente sensible”. Indicó que “comenzar a discutir es un paso muy importante, sin la necesidad de amarrarnos a ninguna posición en particular”.
Agregó, que el tema “no será el centro de los debates de la Cumbre, pero puede ser puesto sobre la mesa porque los Estados Unidos, por primera vez, están dispuestos a hablar de ello. Y son ellos son el mayor consumidor de drogas en el mundo”.
“Yo no soy el dueño de la verdad. Quiero que el mundo entre en esta discusión”, dijo; “puede haber varias maneras: despenalizar el uso, la despenalización de la producción, concentrar los esfuerzos contra la trata de personas. Hay varias alternativas. No podemos tomar una decisión sin tener pruebas de los expertos en la materia”, agregó.