La inflación brasileña sumó 0,67% en abril, y alcanza 6,28% en doce meses, peligrosamente cerca del máximo de tolerancia de la meta oficial, informó el viernes el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).

En marzo, la inflación brasileña había alcanzado un pico de 0,92% y el mercado esperaba que en abril continuara todavía alta, en torno a 0,8%, para una caída más intensa en mayo.

La inflación de abril de 2013 había sido de 0,55%.

En cuatro meses, el país acumula alza de precios de 2,86%. La meta oficial es de una inflación anual de 4,5%, con un margen de dos puntos de límite (hasta 6,50%).

El precio de los alimentos continuó siendo el principal impulsor de la inflación en abril, aunque se ha desacelerado. Las patatas han aumentado 43% de precio este año, el tomate 29%, y los frijoles 21%, según el IBGE.

Los transportes también impulsaron el alza de precios de abril.

Hace poco más de un año, la elevación de la inflación y de los transportes fueron considerados causas de la pérdida de popularidad del gobierno y un detonante de las intensas protestas callejeras en el país.

El Banco Central y el gobierno aseguran estar empeñados en mantener la inflación bajo control.