En total Henry Loaiza Ceballos, deberá reparar con cerca de mil salarios mínimos legales vigentes a los familiares de 42 muertos, 22 secuestrados y un desaparecido, en hechos que se remontan a marzo de 1990 en el municipio vallecaucano de Trujillo.
Según la investigación, todo comenzó cuando miembros del ELN emboscaron a una patrulla de Policía dejando como resultado siete uniformados y un guerrillero muerto.
Luego de ese hecho, fue conformado un grupo paramilitar que al parecer, en retaliación por la presunta colaboración de habitantes del municipio con grupos subversivos, asesinaron a las 42 personas, secuestraron a 22 y desaparecieron a otro (según el fallo).
En la decisión judicial se profirieron dos sentencias condenatorias. La primera por 20 años de cárcel, por su participación y responsabilidad en la masacre y la segunda, de 30 años de prisión por el delito de homicidio agravado.