EL primer procedimiento en microcirugía de autotransplante de huesos, se realizó en el Hospital de San José de Bogotá, donde con el fin de salvar la movilidad de la mano de una mujer de 20 años a causa de un accidente de tránsito, se logró poner un fragmento de hueso de pie en la mano, marcando así un hito en la historia de la salud en el país.
Carlos Torres, médico cirujano, especialista en cirugía plástica reconstructiva y estética y supraespecialista en microcirugía y cirugía de la mano de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud – FUCS, lideró este procedimiento innovador que se realizó por primera vez en América en las instalaciones del Hospital de San José, en su servicio de Cirugía Plástica y Reconstructiva y del cual no hay registros en la literatura médica, por lo que es también el primero a nivel mundial.
Torres unió su experticia en este tema junto a su formación en procedimientos por computador para devolverle la movilidad a la muñeca de la paciente, además de aliviar el dolor que se hacía cada vez más intenso. “Hasta ahora, cuando ocurría un trauma como el que le sucedió a esta paciente, la solución era que la mano perdiera la movilidad. Sin embargo, por primera vez en la historia médica y gracias al planeamiento por computador, lo que se determinó fue comparar la articulación del dedo del pie con el de la mano y ejecutar el procedimiento con cálculos milimétricos que permitieron el éxito de la misma”, aseguró.
“En primer lugar, para llevar a cabo esta cirugía se realizaron unas imágenes por tomografía y con un ingeniero posteriormente se sacaron impresiones en 3D que se usaron en el procedimiento”, explica el Dr. Torres quien a su vez cuenta entre su haber más de 250 microcirugías desde el año 2006.
Luego, dentro de la operación, “se tomó un pequeño segmento del pie con una sierra, exactamente el metatarsiano y se pasó a la muñeca para reemplazar la articulación radio carpiana y radio cubital distal. Todo esto debió ser calculado con detenimiento porque además del hueso hay una arteria que es la que irriga esa parte, entonces se optó por conectar con suturas que son más delgadas que un cabello humano, y gracias a esto, empezó a circular de nuevo la sangre por esa parte de la mano”, apunta el especialista.
La paciente, Loren Alexandra Ferrero, manifestó “gracias a este procedimiento liderado por el Dr. Torres pude lograr salvar la movilidad de mi extremidad” y asegura que este acontecimiento le dio un giro positivo a su calidad de vida. Hoy en día se está recuperando óptimamente ya no siente los fuertes dolores, y además paulatinamente reestablece la movilidad de su muñeca.