Sumo Pontífice arribará a Colombia el próximo 6 de septiembre. La meta que se pusieron las partes es lograr un acuerdo para silenciar los fusiles unos días antes, así como cesar otras acciones para bajarle intensidad e ir humanizando el conflicto
Al cierre del segundo ciclo de negociaciones en Quito (Ecuador) el Gobierno y el Eln anunciaron su intención de trabajar de forma acelerada en llegar a un acuerdo para un cese el fuego y de hostilidades. A pesar de que el tercer ciclo arranca el próximo 24 de julio, con este propósito una mesa especializada trabajará desde el 10 de julio.
Las partes se fijaron el propósito de alcanzar el cese el fuego y de hostilidades antes de la llegada del papa Francisco a Colombia, es decir antes de septiembre próximo, según dijo a Caracol Radio el jefe del equipo negociador del Eln, Pablo Beltrán.
“Estamos concluyendo parcialmente, por esto, porque estamos dejando una especie de receso gradual para la otra semana y después sigue la mesa. Entonces, no vamos a hacer los recesos tradicionales sino va a ser un receso parcial para poder seguir desarrollando un intercambio dirigido a detallar más lo que sería un cese bilateral”, aseguró Beltrán.
Añadió que “ese tema por la urgencia, dado que como hemos comprometido la palabra que vamos a buscar que haya ese cese días antes que llegue el papa Francisco. Entonces eso es lo que ha llevado a poner un horario especial de trabajo en la mesa para poder avanzar en unos tiempos muy precisos que ya están acordados”.
Beltrán dijo que el cese el fuego bilateral que se lograría “sería como un saludo a la visita. Esas visitas a Colombia son cada 20 años, entonces es la oportunidad de un alivio en general en términos de lo que implica el cese, pero también un saludo a la visita del Papa y que se conozca a nivel del mundo que también se sigue buscando una paz completa”.
El integrante del Eln destacó que el Sumo Pontífice ha estado muy pendiente de la paz en Colombia, “si se está en un proceso y él viene a saludar ese proceso, lo mínimo que se puede hacer es recibirlo con otro saludo en correspondencia”, dijo Beltrán.
Destacó el viraje en la postura del Gobierno que se había negado a discutir un cese el fuego bilateral con el Eln desde el comienzo de la negociación, “hoy coincidimos que vamos a buscar ese cese. Es algo histórico, el Eln nunca ha pactado este tipo de acuerdo de cese”, dijo.
Cese de hostilidades
El pasado 21 de junio, el jefe negociador en Quito, el ex ministro Juan Camilo Restrepo, expresó a nombre del Gobierno por primera vez su intención de analizar la posibilidad de un cese el fuego bilateral y de hostilidades con el Eln. Aunque fue claro que previamente esta guerrilla debe cesar sus acciones terroristas y el secuestro.
Pablo Beltrán explicó sobre la discusión en la mesa acerca de este tema que “cuando se dice cese tiene dos componentes: se va a pactar un cese al fuego, dijéramos de acciones ofensivas, pero a su vez se va, y esta es la parte que aún resta, se está tratando de precisar que cada parte nos vamos a comprometer a hacer acciones de alivio humanitario hacia la población civil. Ese segundo componente también está acordado que se incluya y lo que falta es precisar los términos de cómo sería”.
Añadió que “cada parte hemos puesto sobre la mesa una lista de las acciones que le exige al otro que se cesen mientras el cese”, como sería en el caso de esta guerrilla que pare los secuestros y ataques contra la infraestructura petrolera y energética.
Beltrán dijo que en medio de esta discusión el Eln ha pedido más acción del Estado contra los grupos paramilitares que copan territorios que dejaron las Farc y están asesinando líderes sociales.
“Si los grupos paramilitares en muchas regiones pasaron de ser grupos de 10 a grupos de 100 y se pasean arriba abajo, las comunidades denuncian eso pero los oficiales militares y policiales de esas zonas no dicen nada, no hay un combate, pues hay que llamarlos a cuentas. Eso le hemos dicho al Gobierno, a la delegación del Gobierno, que eso sería buscar neutralizar esa matanza de líderes. Ese es el punto que estamos colocando, que también haya un cese de hostilidades contra los líderes y las comunidades”.
Finalmente, Beltrán reveló que se está trabajando en la mesa de Quito para que lo que se pacte en el cese el fuego bilateral “sea lograble, sea medible para poder ver si se cumple o no y sea verificable. Bajo esos tres criterios es que se busca ya ponerle la letra menuda al cese”, dijo.
Versión del Gobierno
El Gobierno nacional señaló en un comunicado que con el fin de dar el mayor dinamismo posible y aprovechar de la mejor manera los tiempos de receso, una mesa especializada trabajará los temas atinentes al punto 5F de la agenda sobre Acciones y Dinámicas Humanitarias, que beneficien a la población civil alejándola del conflicto.
Añadió que “dicha comisión le prestará especial atención a estudiar si las condiciones están dadas para avanzar hacia un cese al fuego bilateral acompañado de un cese de hostilidades, todo esto dentro del propósito de crear confianza entre las partes e ir generando condiciones que permitan bajarle intensidad e ir humanizando el conflicto armado en provecho de civiles no combatientes”.
De igual forma dijo que “durante este ciclo (segundo) acordamos con el Eln la creación de un equipo conjunto de pedagogía y comunicación para la paz así como la conformación de un grupo de países de apoyo, acompañamiento y cooperación a la mesa de conversaciones”.
Por su parte, el jefe negociador Juan Camilo Restrepo, escribió en Twitter “cese al fuego + cese de hostilidades. Esta es la ecuación virtuosa que estamos procurando negociar en Quito”.
Papel de la Iglesia
Un rol determinante tuvo la Iglesia Católica para que se pudiera iniciar en la mesa de Quito la discusión sobre el cese el fuego y de hostilidades. El tema se había tornado en un cuello de botella porque mientras que el Eln pedía que el Ejército silenciara los fusiles en su contra para a renglón seguido frenar los atentados terroristas y los secuestros, el Gobierno exigía que primero esta guerrilla diera muestras de paz parando estas acciones.
No obstante en una misiva los obispos invitaron a las partes a analizar la posibilidad del cese el fuego y de esta manera aminorar el sufrimiento de la población civil por los efectos del conflicto.
Fue entonces cuando Juan Camilo Restrepo en una carta de respuesta a los obispos reveló la disposición del Gobierno a dialogar sobre el cese el fuego bilateral con el Eln.
"Permítanme señalar entonces, que coincide su carta exactamente con el momento que se vive en la mesa de Quito. Ese mismo día, el pasado martes 13 de junio, el Gobierno le informó a la delegación del Eln la disposición de iniciar de inmediato el estudio de las condiciones para acordar un eventual cese bilateral al fuego y de hostilidades", señala Restrepo en la misiva.
Síganos en nuestras redes sociales: