El cardenal guatemalteco Rodolfo Quezada Toruño, promotor de los acuerdos que pusieron fin a 36 años de cruenta guerra civil en Guatemala, murió este lunes a los 80 años debido a un cáncer en los intestinos, confirmaron fuentes médicas y eclesiásticas.
La Iglesia Católica informó en una nota oficial que el religioso falleció por una perforación intestinal provocada por el cáncer en el sanatorio Hermano Pedro, en la periferia sur de la capital, donde ingresó el pasado viernes por una infección en la sangre.
Los restos del religioso, quien según el médico Jorge Bonilla murió a las 06H00 locales (12H00 GMT), serán trasladados a la Catedral Metropolitana, para las honras fúnebres.
"Fue el precursor de la paz, siempre estuvo luchando por la paz y la reconciliación de Guatemala", afirmó el presidente Otto Pérez, al anunciar en rueda de prensa que decretó tres días de duelo nacional y ordenó que las banderas ondeen a media asta.
"Es un dolor muy grande y una gran pérdida para el país", comentó la Premio Nobel de la Paz 1992, la indígena guatemalteca Rigoberta Menchú, al expresar su pésame y solidaridad a la familia.
La Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) manifestó su "profunda consternación ante el fallecimiento del 'Obispo de la Paz'", destacando el papel decisivo del religioso en "el lento y difícil proceso de negociación entre los bandos en conflicto".
"El lamentable fallecimiento del Cardenal de la Paz deja un gran vacío en la historia y el presente del país", destacó por su lado la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un organismo avalado por la ONU.
Quezada Toruño, designado cardenal el 21 de octubre de 2003 por el papa Juan Pablo II, presidió entre 1987 y 1993 la Comisión Nacional de Reconciliación, promotora del proceso de diálogo entre el gobierno y la ex guerrillera Unidad Nacional Revolucionaria de Guatemala (URNG, hoy partido político).
Su mediación derivó en la firma, el 29 de diciembre de 1996, de un acuerdo de paz que puso fin a un conflicto armado interno que en 36 años causó 200.000 muertos y desaparecidos.
Ordenado sacerdote en Guatemala el 21 de septiembre de 1956, cumplió misión pastoral en la curia metropolitana y también ejerció la docencia en la capital guatemalteca.
Nacido el 8 de marzo de 1932 en Ciudad de Guatemala, Quezada Toruño fue presidente de la Conferencia Episcopal de su país entre 1988 y 1992, así como del Congreso Americano Misionero.
Además, fue arzobispo en la sede metropolitana de Guatemala y dejó esa responsabilidad el 2 de octubre de 2010, cuando el papa Benedicto XVI le aceptó su renuncia al haber superado los 75 años de edad, como ordenan la leyes católicas. En su lugar fue nombrado Oscar Julio Vián.