A pesar de un intento de apelación, uno de nulidad y de un recurso de súplica el Consejo de Estado sigue considerando que el gobernador de Chocó, Luis Gilberto Murillo, debe seguir suspendido provisionalmente luego de que hace un par de semanas el Alto Tribunal considerara que la suspensión debe seguir, por lo menos, hasta que el Tribunal Administrativo de esa corporación resuelva una demanda en contra de su elección.
Lego de la decisión tomada por la sección Quinta del Alto Tribunal, lo normal sería que se le enviara una notificación al presidente Juan Manuel Santos para que él en uso de sus facultades fuera quien suspendiera al Gobernador. Sin embargo, Murillo no parece haberse dado por vencido y agotará los recursos que tiene a su favor.
Augusto Cadena, abogado del Gobernador, explicó que aún queda un recurso el cual será utilizado por su cliente, además dijo que Murillo ha ejercido su defensa legalmente y que los hechos que son causantes de su inhabilidad habían sido informados con anterioridad a organismos de control y diferentes tribunales.
La defensa agregó que el mandatario no está incurriendo en ninguna inhabilidad y que puede seguir ejerciendo su mandato, por lo que recurrirán a todas las instancias necesarias para poder demostrar que la elección de Luis Gilberto Murillo fue legítima.
Conocedores en materia jurídica aseguraron que después de la negativa del Consejo de Estado de terminar con el proceso y la ratificación del tribunal de mantener en firme la suspensión preventiva, la opción que queda es trasladar el proceso a otro magistrado para que lo estudie y tome la decisión de notificar al presidente Santos para que haga efectiva la orden de suspensión, o seguir aceptando recursos para que el Gobernador siga apelando su inhabilidad.
De presentarse este nuevo recurso, Murillo podría permanecer algunos meses más en el cargo mientras el Alto Tribunal toda una decisión respecto al nuevo recurso.
Sin embargo, las cosas no marchan tan bien ya que se ha empezado a rumorar que las cuatro colectividades (Partido Conservador, Partido Verde, ASI y Cambio Radical) que avalaron al actual Gobernador están evaluando la posibilidad de empezar a buscar los candidatos que integrarían la terna que le entregarían al presidente Santos para que escoja a un nuevo mandatario por lo menos mientras se decide la situación de Murillo, quien fue elegido por más de 50 mil votos en los pasados comicios. Por ahora los partidos tendrán que esperar que el Consejo de Estado notifique al Jefe de Estado para que puedan postular sus nombres.
A pesar de que las condiciones no han estado a favor de Murillo, los chocoanos han expresado su apoyo a la gestión que ha desarrollado el mandatario regional durante estos meses y han salido a las calles de Quibdó a manifestar por una decisión que consideran injusta.
Incluso, el Gobernador envió hace poco una misiva en la que agradecía las diferentes muestras de apoyo que ha recibido y dijo que cree que se le ha violado el debido preciso.
“La decisión de la Sección quinta del Consejo de Estado, cercenó mi derecho al debido proceso y a un juicio justo y con ello esta generando inestabilidad institucional innecesaria y arrebatándole al Chocó y a sus habitantes su mandatario legítimamente elegido con la mayor votación en la historia de esta región”, expresó en la misiva.
La historia
El problema que está actualmente afectando al mandatario se dio en 1997 cuando el actual Gobernador fue condenado, por incurrir en el delito de peculado por asignación, a seis meses de prisión y a pagar una multa de cinco millones de pesos a la Corporación Nacional para el Desarrollo de Chocó (Codechocó), entidad que dirigía, por utilizar sus recursos en obras de reparación en una escuela. En ese momento, algunas personas lo acusaron de gastar el dinero de la Corporación en gastos que no estaban establecidos.
Ante las acusaciones que le estaban haciendo, Luis Gilberto Murillo justificó el gasto que había hecho resaltando el impacto ambiental que habían tenido las obras, argumento que le valió para ser absuelto en primera instancia por un juez penal de Quibdó. Sin embargo, cuando el caso llegó al Tribunal Superior de Quibdó las cosas cambiaron, ya que no encontraron los beneficios ambientales de los que Murillo había hablado y decidieron proceder a condenarlo.
El, ahora Gobernador, siguió peleando por su caso y en el año 2007 decidió retomarlo. Se dirigió a un Juzgado de Ejecución de Penas de Quibdó para apelar su caso teniendo en cuenta que en el nuevo Código Penal de la época el delito por el cual él había sido juzgado ya había desaparecido, pero ante esa nueva reclamación el tribunal decidió que el delito solo había sido aplazado.
Cuando Murillo tomó la decisión de presentarse a la gobernación de Chocó se radicó ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) una demanda por la supuesta inhabilidad en la que incurría el mandatario al haber sido condenado, sin embargo, un concepto entregado en septiembre del año pasado por el CNE expresó que Luis Gilberto Murillo estaba habilitado para participar en los comicios de octubre.
El lío se extendió hasta los magistrados del CNE, ya que algunos de ellos fueron demandados por prevaricato al entregar, de manera irregular según el demandante, a Murillo la credencial que avaló su candidatura a la Gobernación del Chocó por cuatro partidos.
Por ahora solo resta esperar las decisiones que tome el Consejo de Estado pare decidir si Murillo está incurriendo en una inhabilidad a raíz de la condena en 1997 por peculado por asignación y además, para determinar si continúa o no con suspensión preventiva tal y como se decreto desde el pasado mes de julio.