Finalizado el periodo de inscripciones tres candidatos oficializaron su aspiración para ocupar el cargo de  gobernador de La Guajira, contienda electoral que tendrá lugar el domingo 1 de junio de 2014, informó ayer la Registraduría.

El periodo de inscripción inició el 7 de marzo y culminó el 14 de abril, durante el cual se inscribieron los siguientes candidatos:

José María Ballesteros, inscrito por Opción Ciudadana.

Wilmer David Brito, registrado por una coalición de los partidos Social de Unidad Nacional (La U) y Conservador.

Luis Eduardo Gómez, avalado por una coalición entre la Alianza Verde y la Unión Patriótica.

De acuerdo con el calendario electoral dentro de los 5 días hábiles siguientes al cierre de inscripciones, es decir hasta el miércoles 23 de abril de 2014, se podrán realizar modificaciones.

El viernes 25 de abril se publicará la lista de candidatos inscritos, la cual se remitirá, este mismo día, a los organismos competentes para que verifiquen si existen o no posibles inhabilidades.

El domingo 25 de mayo vence el plazo para que los partidos y movimientos políticos realicen la modificación de los candidatos, en caso de muerte de algún aspirante.

KikoGómez

El ministro del Interior, Aurelio Iragorri, convocó a elecciones atípicas mediante el Decreto 651 del 28 de marzo de 2014. Allí el alto funcionario dio cuenta de “que mediante Decreto 420 del 26 de febrero de 2014 se aceptó la renuncia presentada por el señor Juan Francisco Gómez Cerchar, identificado con la cédula de ciudadanía No. 5.153.192 de Barrancas, gobernador del departamento de La Guajira, al cargo para el cual fue elegido el 30 de octubre de 2011, para el período constitucional 2012 -2015”.

Efectivamente, el presidente Juan Manuel Santos le aceptó la renuncia a Kiko Gómez, preso por varios homicidios y acusado de corrupción, nombrando posteriormente como mandataria seccional encatgada a Sugeila Oñate.

Para la senadora electa Claudia López, de la Alianza Verde, la renuncia de Gómez indica que “como todos los delincuentes, el que tiene rabo de paja le teme a la justicia. Y Gómez está tratando con esa renuncia de que su proceso pase a la justicia ordinaria en Riohacha, donde obviamente es el rey y tiene poder de coerción, coacción y de amedrentamiento”.

Actualmente, Gómez está preso en La Picota de Bogotá, acusado por los asesinatos del concejal Luis López, en 1997, y Luis Alejandro Rodríguez y Rosa Mercedes Cabrera en 2000.

La Procuraduría le sigue también un proceso por la presunta comisión de irregularidades en el ejercicio de sus funciones y recientemente López lo acusó de ser el autor intelectual de la muerte del neurólogo Jorge Daza, hermano de su contendor político Bladimiro Cuello.

En enero, un fiscal delegado ante la Corte Suprema revivió un proceso que involucra a Gómez: el homicidio en 2008 de Henry Ustariz y Wilfrido Fonseca, esposo y escolta de la exalcaldesa de Barrancas, sur de La Guajira, Yandra Cecilia Brito, quien denunció al hoy exgobernador como el autor intelectual del crimen, afirmando que fue ayudado por varias personas entre ellas Marquitos Figueroa, de quien se ha dicho es el jefe del brazo armado del mandatario guajiro.

Hace poco, el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, ofreció una recompensa en el Cesar de 200 millones de pesos por información que permita la captura de Figueroa.

Paramilitarismo

En declaraciones rendidas en septiembre, los extraditados jefes paramilitares Salvatore Mancuso y Arnulfo Sánchez, alias Pablo, ratificaron los nexos de Gómez con sus estructuras armadas ilegales.

Sánchez confirmó el vínculo de Gómez con el paramilitarismo (era la persona que les servía de puente con miembros de la Policía y el Ejército) y con varios homicidios, así como el de Figueroa, a quien definió como "un comandante de la organización".

Según Sánchez, gracias a Gómez los paramilitares entraron a La Guajira por el sur, es decir, por la zona de Barrancas, en la época en la que Gómez era alcalde, a tal punto que varios de sus hombres se instalaron tanto en una finca del dirigente político como en su casa en Barrancas.

Aunque la relación entre los paramilitares y Gómez se estrecharía cuando el dirigente decidió lanzarse a la Gobernación de La Guajira, esta se complicó, de acuerdo con Sánchez, porque Figueroa, relacionado con la banda de Los Curicheros (grupo de sicarios de la ranchería Curiche que opera bajo el mando de Ignacio Nacho Pana, aliado de Figuero) y controlaba una gran zona de la Alta Guajira, no aceptó rendirle cuentas a Rodrigo Tovar, alias Jorge 40, lo que desató una guerra en la región. Desde entonces Figueroa estaría radicado en Maracaibo, Venezuela.

En el relato de Sánchez, Gómez calmó los ánimos asegurando que "las cosas de 40 eran de 40" y que él las respetaría; sin embargo, los paramilitares condicionaron su apoyo a que les ayudara a hacer un acercamiento con Figueroa para que él y su banda trabajaran con esas estructuras armadas ilegales.

Sánchez contó que Gómez, por su cercanía al extraditado exsenador Santander Lopesierra, alias el Hombre Marlboro, ayudó a organizar un impuesto a los contrabandistas de gasolina y fue el encargado de garantizarle al Bloque Norte una tajada en los contratos de los municipios del sur de La Guajira.

La senadora López señaló hace poco que aunque Gómez está preso, Figueroa sigue libre, pero que confía en que próximamente “será capturado y extraditado”.

“Hace varios años estamos investigando en La Guajira y los que se creían intocables han caído, por eso confiamos en que sigan los otros que aún están libres”, manifestó.