Los oficiales militares retirados detenidos en México acusados de delitos relacionados con el narcotráfico se declararon inocentes y uno de ellos afirmó que fue obligado a incriminar al general Tomás Ángeles Dauahare, ex subsecretario de Defensa, dijo una fuente judicial.

La orden de un juez federal el martes para encarcelar a cuatro generales retirados, un coronel y un mayor se ha convertido en el peor episodio de corrupción en las filas del ejército mexicano, institución que ha encabezado en los últimos años la lucha contra el narcotráfico en México.

Los generales retirados Ángeles Dauahare y Ricardo Escorcia, así como el general Roberto Dawe González, y el coronel retirado Jesús Hernández Soto "negaron" el miércoles ante el juez federal Raúl Valerio "los cargos y haber pertenecido a un grupo delictivo", dijo a la AFP una fuente de la oficina del Juzgado Tercero de Distrito en Procesos Penales Federales.

Los militares son acusados de haber recibido cantidades millonarias del integrante del cártel de Beltrán Leyva a cambio de protección. Los oficiales declararon ante el juez en la prisión de máxima seguridad de Almoloya, centro de México.

El juez tiene plazo hasta el próximo miércoles para determinar si los cuatro militares quedan en libertad por falta de pruebas o declara la prisión formal.

El general de División en retiro Escorcia dijo ante el juez que "la declaración que había dado ante un ministerio público era falsa y que lo habían obligado a estampar su firma", añadió el portavoz del juzgado.

Agregó que el general retirado dijo que fue obligado a inculpar al general en retiro Ángeles Dauahare, quien fue subsecretario de Defensa entre 2006 y 2008. y cercano colaborador del actual secretario Guillermo Galván./AFP