Combatientes sirios apoyados por Estados Unidos rompieron las líneas de defensa del centro de Raqa, bastión del grupo Estado Islámico (EI) en Siria, tras la apertura de brechas en la muralla que rodea la ciudad vieja gracias a los bombardeos aéreos estadounidenses.
Al mismo tiempo, en Irak, las fuerzas gubernamentales iraquíes, también apoyadas por Estados Unidos, libran encarnizados combates con los yihadistas del EI, atrincherados en sus últimos reductos de la ciudad vieja de Mosul.
Desde hace meses, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una coalición kurdo-árabe, y las fuerzas de Bagdad han lanzado sendas ofensivas para expulsar al EI de sus principales bastiones de Raqa, en Siria, y Mosul, en Irak, conquistados por los yihadistas en 2014.
Las FDS se han apoderado de varios barrios del este y oeste de Raqa desde que entraron en la ciudad el 6 de junio. El crucial apoyo aéreo de la coalición dirigida por Washington les ha permitido avanzar hacia el centro de la ciudad, pese a la feroz resistencia del EI.
"Fuerzas de la coalición apoyaron el avance de las FDS en la parte más fortificada de Raqa abriendo dos pequeñas brechas en la muralla de Rafiqah que rodea a la ciudad vieja", señaló comando de las fuerzas estadounidenses en Medio Oriente (Centcom).
- 'Verdadera batalla' -
Se trata de una "importante etapa en la campaña para la liberación de la ciudad" se felicitó en un tuit el enviado estadounidense ante la coalición, Brett McGurk.
En su cuenta Twitter, las FDS confirmaron su progresión hacia la ciudad vieja.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), "hay combates en cuatro lugares del este del casco antiguo, donde las FDS deben lidiar con la densidad de la población civil y las bombas colocadas por el EI".
La oenegé anunció además nuevos bombardeos de la coalición contra otros barrios de Raqa. "La verdadera batalla ha comenzado hoy", dijo Rami Abdel Rahman, el director del OSDH. "El mayor reto para las FDS consiste en poder abrir corredores de seguridad para evacuar a los civiles".
Las FDS lograron retomar el barrio de Al Senaa, a las puertas del centro de la ciudad, pero, a medida que progresan, crece el temor por la situación de la población civil.
"Ahora están en el casco antiguo, una zona mucha más poblada", explicó Husam Isa, militante del colectivo Raqa está siendo masacrada en silencio. "Puede que haya cientos de víctimas", dijo a la AFP.
La ONU calcula que quedan unos 100.000 civiles atrapados en esa ciudad, escenario de las peores atrocidades del grupo yihadista desde que la conquistó en 2014.
- Encarnizados combates en Mosul -
La coalición cree, que unos 2.500 combatientes del EI defienden Raqa, su capital de facto en Siria.
Una pérdida de Raqa no significaría el final del EI en el país. El grupo aún controla algunos sectores de la misma provincia de Raqa, la gran parte de la provincia vecina de Deir Ezzor (este), así como porciones de territorios en las provincias de Homs y Hamas (centro), así como en la de Hasaké (noreste).
En el vecino Irak, las fuerzas armadas progresan hacia los últimos reductos yihadistas de Mosul, último gran bastión urbano del EI en Irak.
Ante el avance de los soldados iraquíes los yihadistas han multiplicado los atentados suicidas, algunos de ellos cometidos por mujeres y adolescentes.
En un tuit, Brett McGurk indicó que los "terroristas del EI" controlan ahora "menos de un kilómetro cuadrado en Mosul".
En efecto, más de ocho meses después del inicio de la ofensiva para retomar la ciudad, la segunda de Irak, el EI ya solo controla una pequeña parte en el oeste.
Según fuentes militares, todavía quedan "al menos 200 combatientes del EI" en Mosul, en su mayoría extranjeros.
La reconquista de Mosul no pondrá tampoco fin a la presencia del EI, en Irak, donde controla todavía varias zonas.