Después de ocho años, la infraestructura del Plan Maestro de abastecimiento y seguridad alimentaria de Bogotá, que contempla la construcción de cuatro plataformas logísticas (plazas comerciales de alimentos) para favorecer a sectores vulnerables de Bosa, Ciudad Bolívar, Usme y Suba, fracasó. La Personería de Bogotá comprobó que dos de estas obras desaparecieron de los planes del Distrito y que seis años después sólo una fue construida, pero está siendo subutilizada.
Un decreto expedido en 2006 estableció la construcción de las cuatro plataformas para el abastecimiento de alimentos a corto plazo, pero el Plan de Desarrollo de 2008 sólo contempló dos, una en Ciudad Bolívar y otra en Bosa. La primera de ellas, denominada Los Luceros, fue terminada a comienzo de 2011; sin embargo, su utilización actual no supera el 30%. De la segunda, en Bosa, escasamente existe un lote y la licencia de construcción.
A pesar de que se han destinado $11.090 millones, provenientes de convenios de cofinanciación entre la Alcaldía de Ciudad Bolívar, la Unidad Ejecutiva de Servicios Públicos, la Universidad Distrital, Metrovivienda, Ipes, y la Secretaría de Desarrollo Económico, la plataforma logística del sector del Lucero, en Ciudad Bolívar, está subutilizada.
La Personeríadeterminó que de los 145 puestos sólo un poco más de cuarenta están siendo ocupados, es decir 30%. También se constató que algunos productos a la venta en la plaza no estaban en el óptimo estado incumpliendo con el propósito de la plataforma que es brindar productos de calidad.
De acuerdo con el informe, desde 2004 se suscribió el primer convenio para la construcción de la plaza con una inversión inicial de $1.653 millones. Durante ese tiempo se presentaron suspensiones, adiciones, prórrogas y todo tipo de retrasos. Además, la suscripción de cuatro convenios más para su construcción y contrato para ese fin, así como tres contrataciones más para definir el modelo de administración de la plataforma, sin que aún este claro cómo funcionará la plataforma.
Según la Secretaría de Desarrollo Económico, en el presente año sólo destinará unos recursos para la prueba piloto hasta mayo, a partir de allí se definirá si la plataforma se entrega al Ipes, se concesiona o se realiza un acuerdo con Corabastos.
El informe indica que “si la plataforma no logra involucrar al pequeño y mediano productor y consumidor, el Distrito habrá invertido más $11.000 millones, cerca de ocho años de trabajo, en un proyecto que no genera rentabilidad social”.
Por eso, agrega el informe, “para la Personería no se justifica que dineros públicos se inviertan en una construcción que debe ser explotada por un operador privado, toda vez que dentro de la competencia de la Secretaría de Desarrollo Económico, no se contempla la administración y operación de este tipo de establecimientos”.
Entre tanto, la invasión del espacio público en los alrededores de la plataforma aumenta, especialmente de vivanderos informales, sin que las autoridades locales realicen alguna acción para evitar esa competencia que disminuye los ingresos de los pocos locales de la plaza.
Sólo hay un lote
Pese a que para la plataforma de Bosa se han invertido más de $2.300 millones, lo único que se tiene es un lote ubicado en la Ciudadela El Recreo de Bosa y una licencia de construcción expedida en marzo de 2010 (se estima que la obra tendrá un costo de $14.000 millones). No obstante, ni se ha contratado su edificación ni existe presupuesto en la presente vigencia.
Mientras tanto, alrededor del predio fueron ubicados de manera provisional los comerciantes. Por su parte, el lote presenta un cerramiento deteriorado y falta de control para la extinción de plagas, insectos y roedores.