Aunque septiembre las ventas de los comerciantes apenas experimentaron un ligero crecimiento, esta situación no se compadece con los esfuerzos que hizo el sector por estimular las compras.
De acuerdo a la Federación de Comerciantes de Colombia, Fenalco, los empresarios de vestuario y calzado se deshicieron de buena parte de los saldos de inventario y quedaron preparados para comercializar en el fin de año nuevas colecciones.
Para el 34% de los comerciantes consultados por Fenalco, en septiembre las ventas, expresadas en cantidades físicas, fueron superiores a las obtenidas en igual mes del año pasado; para un 40% fueron muy similares, en tanto que para el 26% fueron más bajas.
El balance, que es la diferencia entre las opiniones buenas y malas fue de 8, inferior al registrado en agosto. Entre las agrupaciones con un desempeño mediocre se destacan los vehículos particulares, cuyas ventas continuaron disminuyendo, y los alimentos y bebidas no alcohólicas.
Los mayoristas de alimentos reportaron un aceptable comportamiento, lo que sugiere que hubo un buen ritmo de pedidos por parte de los tenderos de barrio y del llamado canal horeca (hotelería, restaurantes y cafeterías). También hubo buen movimiento entre los comerciantes que venden mercancías norteamericanas y que han bajado de precio por efecto de la entrada en vigencia del TLC.
Importante subrayar el buen ánimo que se respira entre los comerciantes para el cierre de año: un 59% de los consultados piensa que sus actividades tendrán buen comportamiento, y sólo un 12% se declara pesimista. Cabe señalar que el 100% de los comerciantes de la ciudad de Cúcuta cree que las cosas irán a empeorar en el transcurso de los próximos seis meses.
Sin embargo, para el final del año los comerciantes albergan la esperanza que las ventas mejoren ante las mejores perspectivas la economía y la capacidad de pago de los colombianos.