Irán y las grandes potencias acordaron el viernes de noche ampliar hasta el 24 de noviembre el plazo que concluía este domingo para llegar a un acuerdo sobre el programa nuclear del primero, indicó una fuente diplomática iraní y otra occidental.
"Las negociaciones sobre la ampliación del acuerdo (interino) de Ginebra han sido un éxito. Los detalles del acuerdo se anunciarán pronto", indicó la fuente iraní.
Un diplomático occidental confirmó el acuerdo y precisó que ambas partes se dieron hasta el 24 de noviembre para cerrar lo que sería un acuerdo histórico. "Es hasta el 24 de noviembre", dijo.
Irán y las seis grandes potencias mundiales llevaban negociando casi sin pausa desde febrero pasado, con el fin de cerrar un acuerdo definitivo antes del 20 julio, cuando expiraba el acuerdo interino cerrado en Ginebra en noviembre.
Washington e Irán sentaron las bases para prolongar las negociaciones durante la semana, después de que el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, protagonizara dos días de intensas negociaciones con su homólogo iraní, Mohamad Javad Zarif.
"A pesar de que logramos progresos tangibles en algunos dominios y que trabajamos juntos en la elaboración de un texto (...), subsisten desacuerdos significativos en algunos aspectos claves", dijo la jefa de la diplomacia de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, en un comunicado conjunto con el canciller iraní.
Irán y los países del 5+1 (Rusia, Gran Bretaña, Estados Unidos, Francia, China y Alemania) manifestaron su determinación de alcanzar un acuerdo definitivo "lo más pronto posible", añadió.
- Washington desbloquea fondos "congelados" -
El Departamento de Estado norteamericano informó el viernes el acuerdo, después de que Washington anunciara que desbloquearía 2.800 millones de dólares de fondos iraníes congelados.
Según el acuerdo logrado el viernes por la noche en Viena, Estados Unidos liberaría estos fondos a cambio de que Irán acepte convertir en combustible su uranio altamente enriquecido (en concentración de 20%), dijo Kerry en un comunicado.
El jefe de la diplomacia estadounidense hizo hincapié en que, desde que se alcanzó un acuerdo de transición de seis meses en noviembre pasado, Irán se había plegado a su parte del trato "de neutralizar su reserva de uranio enriquecido al 20%; limitar su reserva de uranio enriquecido al 5%" y no instalar más centrifugadoras.
"Tengo claro que hemos hecho progresos tangibles en nuestras amplias negociaciones, pero hay verdaderas deficiencias en algunas áreas", añdió Kerry.
"Hoy contamos con un borrador que abarca los temas principales, pero todavía hay toda una serie de paréntesis y espacios en blanco en el texto".
Se han hecho esfuerzos para cerrar la posibilidad de crear una bomba de plutonio en el reactor iraní de Arak, y se han tomado medidas para garantizar que las instalaciones de Fordow no puedan ser utilizadas para fabricar una bomba atómica.
Estados Unidos también procuró garantizar las inspecciones y asegurarse de que las existencias de uranio de bajo enriquecimiento no pueda convertirse en material apto para bombas.
Pero Kerry destacó que las lagunas en el texto se deben a que aún no se ha resuelto si Irán mantiene su capacidad de enriquecer uranio.
"Este asunto es un componente absolutamente crítico de cualquier acuerdo potencial. Tenemos mucho trabajo que hacer en esta área", continuó.
"Pero dar la espalda prematuramente en nuestros esfuerzos diplomáticos, luego de que se han hecho importantes progresos, sería negarnos a nosotros mismos la capacidad de lograr nuestros objetivos de manera pacífica", explicó.
Como resultado, las conversaciones se extendieron otros cuatro meses, hasta el 24 de noviembre.
Así, Washington e Irán sentaron las bases para prolongar las negociaciones durante la semana, después de que Kerry protagonizara dos días de intensas negociaciones con su homólogo iraní.