El exmilitante de las Panteras Negras que desvió hace 30 años un avión estadounidense hacia Cuba se declaró culpable del cargo de secuestro en un juzgado de Florida para tratar de reducir su condena, informaron este jueves medios locales.
William Potts, de 57 años, hizo su nueva declaración este jueves en una corte en Ft Lauderdale para que fuera desestimado el cargo inicial de piratería aérea, que le acarreaba una pena mínima de 20 años y máxima de cadena perpetua.
Ahora, la jueza Robin Rosenbaum podrá tomar en cuenta los 13 años que pasó Potts en prisión en Cuba, según lo negociado entre la defensa pública del acusado y la parte acusadora, señaló el diario Miami Herald en su página web.
Aunque el cargo de secuestro también puede conducir a la cadena perpetua, no tiene una condena mínima.
La jueza Rosenbaum impondrá la sentencia el 11 de julio.
Potts, que se hacía llamar "Teniente Spartacus" cuando militaba en el grupo radical Panteras Negras, que luchaba por la causa de los negros estadounidenses, regresó de Cuba en noviembre de 2013 alegando que quería rendir cuentas con la justicia local y volver a estar en contacto con sus dos hijas residentes en el país.
Tras volver, se declaró no culpable de piratería aérea y un juez le negó la libertad bajo fianza, por lo que se encuentra recluido en el centro de detención federal de Miami.
El 27 de marzo de 1984, Potts abordó en Nueva York el vuelo 337 de Piedmont Airlines, en el que entregó una nota a una azafata en la que afirmaba que si el avión no desviaba la ruta hacia La Habana activaría supuestos explosivos que llevaba consigo.
Al llegar a Cuba fue arrestado. Tras cumplir su condena comenzó una nueva vida en La Habana, se casó y se convirtió al Islam.
"El acto de terrorismo que perpetré me acosa cada día", declaró a la cadena CNN durante el vuelo que lo llevó de La Habana a Miami en noviembre pasado.