Evolución de un proceso. Tenemos una sospecha intuitivamente confirmada. La razón estriba en los últimos episodios que en cadena se han dado en el centenario diario El Colombiano, el brioso vocero del uribismo: 1) La repentina salida de la directora Ana Mercedes Gómez. 2) La confirmación del periodista Germán Manga en el cargo de Editor General del cotidiano conservador. 3) El regreso de Juan Gómez a la dirección, en sustitución de su hermana menor.
¿Senadora o gobernadora? En los conciliábulos políticos paisas ven a la ex directora Ana Mercedes Gómez en las venideras elecciones parlamentarias, como cabeza de lista de candidatos al Senado, o en su defecto como aspirante a la sucesión del gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, por su cercanía con el matemático que milita en el Partido Verde. Estas especulaciones tienen que ver con la aparición, en público, este lunes, en Medellín, en la tertulia conservadora, del ex ministro Fabio Valencia Cossio, quien por muchos lustros se ha negado a participar como eje principal del debate.
“Yo me llamo”. Así le dicen en los mentideros políticos paisas al nuevo director de El Colombiano, Juan Gómez. Recordamos como si fuera hoy que hace tres años lo invitamos a La Barbería y en la silla giratoria repitió una y otra vez: “Mi jefe se llama Fabio Valencia Cossio… Yo hablo con mi jefe Fabio Valencia Cossio”. Esto significa que en el periódico no se mueve una hoja de papel sin el previo visto bueno del exministro conservador. En el ámbito político regional son famosos los estribillos de Juan para Fabio: “Como usted diga, jefe; como usted mande, jefe; como usted quiera, jefe”. Siendo ministro Valencia, hizo sacar a Fernando Londoño de la nómina de columnistas del rotativo, pese a que era el más leído, porque se oponía a la reelección de Uribe.
Más gestos. El Barquero recuerda aquel lejano día cuando se produjo la salida involuntaria de Gómez Martínez del Ministerio de Transporte, a raíz de la decisión conservadora de no seguir colaborando con el régimen samperista.
En el gobierno de “aquí estoy, aquí me quedo”, el doctor Juan le agradeció a Samper la designación y la confianza que depositó en él, al llevarlo al gabinete, y le manifestó claramente: “Renuncio a este cargo porque me lo ordenó mi jefe Fabio Valencia”.
Otro gesto: el famoso editorial en el que el diario antioqueño salió en defensa de Guillermo León Valencia (el menor del clan) cuando era procesado por la Corte Suprema de Justicia.
Adhesión. El Colombianose jugó a fondo en favor de la elección de Aníbal Gaviria como alcalde de Medellín, en los estertores de la campaña electoral. El periódico aportó tres días antes un enorme titular de primera página que incidió, sin duda, en el resultado: “Luis Pérez comparecerá ante la Fiscalía”.
Pato. La suspicacia intuitivamente confirmada nos lleva a concluir que el director de El Colombiano es Fabio Valencia Cossio. Camina como pato, nada como pato y es un pato.