EU-Irán, un nuevo gesto de cordialidad | El Nuevo Siglo
Lunes, 18 de Enero de 2016

El primer gesto en el nuevo escenario de relaciones entre Estados Unido e Irán se presentó ayer con la liberación de tres de los cuatro ciudadanos irano-estadounidenses a cambio de siete iraníes detenidos en EU,  quienes abandonaron Irán en un vuelo que arribó a Suiza.

 

En Washington un alto funcionario del gobierno, que habló bajo condición de anonimato, confirmó “que nuestros ciudadanos detenidos han sido puestos en libertad” y han salido de Irán. La televisión estatal iraní informó que los ex carcelados abandonaron Teherán a bordo de un “avión especial suizo” con destino a Berna.

 

En el vuelo viajaron el marine Amir Hekmati, el pastor Said Abdeini y el periodista Jason Rezaian corresponsal de The Washington Post. Un cuarto liberado, Nosratollah Khosravi, no abordó la aeronave, según informaron en forma coincidente The Washington Post y The New York Times, que citan a funcionarios del gobierno estadounidense no identificados.

 

El Washington Post confirmó que su corresponsal en Irán salió de la prisión de Evine, en Teherán, y abandonó el país sano y salvo. “Estamos aliviados de que la pesadilla de Jason y de su familia, que ha durado 545 días, finalmente haya terminado”, declaró el director Frederick Ryan en un comunicado. Rezaian abandonó Irán en avión junto a su esposa, Yeganeh Salehi, agregó el Post. El periódico agregó que está “complacido con la liberación por parte de Irán de otros estadounidenses”, pero no dio más detalles.

 

Un editorial del periódico criticó a las autoridades judiciales iraníes, que “violaron repetidamente las propias leyes de Irán, entre otras cosas, con la detención del periodista del Post durante meses -a menudo en régimen de aislamiento- antes de la presentación de cargos, lo que no le permitió prácticamente ningún contacto antes del juicio con su abogado defensor”.

 

Por su parte, la familia del exmarine Amir Hekmati, que enfrentaba la amenaza de ser sometido a pena de muerte en Irán por supuesto espionaje, informó que ha sido liberado y que ya abordó el vuelo que lo sacará del país.

 

“Nuestro hermano, hijo y amigo Amir Hekmati ha sido liberado hoy por Irán. Se nos ha dicho ahora oficialmente que está a bordo de un avión abandonando el país”, dijo la familia en un comunicado.

 

El sábado Teherán había anunciado su puesta en libertad en el marco de un inédito canje con Estados Unidos, que a cambio liberó a siete detenidos iraníes. La información se produjo en momentos en que el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y el jefe de la diplomacia iraní, Mohamad Javad Zarif, se reunían en Viena para poner en vigor un acuerdo sobre el programa nuclear iraní entre Teherán y las grandes potencias.

 

Según The Washington Post, el vuelo que debía sacar a los cuatro detenidos liberados por Teherán se retrasó porque la madre de Rezaian, María, y su esposa, Yeganeh, que también debían acompañarlo en el vuelo en un primer momento no aparecían en el manifiesto de vuelo.

 

Declaraciones bilaterales

 

El presidente iraní, Hasan Rohani, aseguró que se abre una “nueva página” entre Irán y el resto del mundo, tras la entrada en vigor del acuerdo nuclear y el levantamiento de sanciones internacionales impuestas durante años a su país.

 

Este acuerdo, suscrito en julio con las grandes potencias, se oficializó con el visto bueno de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) -cuyo jefe Yukiya Amano viajaba  a Teherán-, quien certificó que Irán había cumplido al garantizar la naturaleza estrictamente pacífica de su programa nuclear.

 

En un discurso, el presidente estadounidense Barack Obama se dirigió directamente a los iraníes, llamándolos a “crear nuevos lazos con el mundo”, y alabó el “progreso histórico” que suponía el acuerdo.

 

Paralelamente, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, anunció que Estados Unidos devolverá a Irán 400 millones de dólares de deuda y 1.300 millones en intereses, en cumplimiento del dictamen de un tribunal internacional, con independencia del levantamiento de las sanciones, lo que dará a Teherán acceso a miles de millones de dólares en créditos.

 

El acuerdo, negociado por Irán con el grupo de potencias 5+1 (Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia, China y Alemania), está considerado uno de los mayores éxitos de la política internacional del presidente estadounidense, Barack Obama, y de su homólogo Rohani.

 

El acuerdo supone el inicio de un acercamiento entre Estados Unidos e Irán, que rompieron sus relaciones en 1980. Pero también genera descontento entre los aliados tradicionales de Washington en la región, como Arabia Saudita e Israel, que temen la influencia de la potencia chiita.

 

Sin embargo, el Tesoro americano anunció nuevas sanciones ligadas al programa de misiles balísticos de Teherán, dirigidas contra cinco ciudadanos iraníes y una red de empresas.

 

No obstante, tres de los cuatro ex prisioneros irano-estadounidenses liberados en el marco del intercambio anunciado, partieron de noche desde Ginebra hacia una base norteamericana en Alemania, tras llegar desde Irán en un avión suizo.

 

Rohani afirmó además que quienes eran escépticos sobre los beneficios del acuerdo nuclear “estaban equivocados”. “Sólo algunas horas después de la entrada en vigor del acuerdo, más de 1.000 líneas de crédito han sido abiertas por diferentes bancos (extranjeros), lo que prueba que los escépticos estaban todos equivocados”, dijo en una rueda de prensa.

 

Las sanciones internacionales han afectado gravemente a la economía de Irán, un país de más de 79 millones de habitantes con grandes recursos petroleros y gasíferos.

 

Los medios económicos internacionales están listos desde hace varios meses para volver a Irán, que posee las cuartas mayores reservas de crudo del mundo y las segundas de gas. Irán, un país de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), podrá volver a exportar libremente el hidrocarburo.

 

Pero la perspectiva de un retorno de Irán a un mercado ya saturado por una abundante oferta y con un precio del barril por los suelos provocó una fuerte caída de las bolsas de los países petroleros del Golfo, en especial la de Arabia Saudita, la mayor de la región/ELNUEVOSIGLOconAFP