Por haber ordenado “chuzadas” ilegales en una investigación de un caso de corrupción, desató protestas en España de activistas de derechos humanos.
Muchos estaban furiosos con el Tribunal Supremo que consideró que Garzón era culpable de haber ordenado escuchas ilegales en un caso que implica a importantes hombres políticos españoles.
Ninguno de los acusados en ese caso fue condenado.
En cambio el juez de 56 años fue inhabilitado por once años, lo que pone de hecho un fin a su carrera de magistrado.
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, dijo que el gobierno tiene "el más absoluto respeto por las decisiones que adoptan los magistrados en este caso".
La jefa del gobierno regional de Madrid, Esperanza Aguirre, miembro del Partido Popular (en el poder), fue más allá.
Es un día "muy alegre para España y la democracia", dijo. "¿Sabe por qué? Porque los fines, y no dudo que los fines de Garzón sean loables, los fines no pueden justificar los medios y ésa es la base del Estado de derecho", explicó
Unos 500 a 600 manifestantes confluyeron en la Puerta del Sol de Madrid gritando "Vergüenza. Garzón, amigo, el pueblo está contigo. Necesitamos más jueces como Garzón".
La hija del juez, María Garzón, escribió una emotiva defensa de su padre, conocido en el mundo por haber intentado hacer extraditar de Londres en 1998 al ex dictador chileno Augusto Pinochet.
"A todos aquellos que hoy brindarán con champán... a ustedes, que durante años han vertido insultos y mentiras... jamás nos harán bajar la cabeza, que nunca derramaremos una sola lágrima por su culpa. No les daremos ese gusto", escribió.
"Nos han tocado, pero no hundido; y lejos de hacernos perder la fe en esta sociedad nos han dado más fuerza para seguir luchando por un mundo en el que la Justicia sea auténtica, sin sectarismos, sin estar guiada por envidias; por acuerdos de pasillo", dijo.
Además de esta condena por haber ordenado escuchas en un caso de corrupción que implica a algunos de los miembros del Partido Popular, Garzón espera el veredicto por los cargos de abuso de poder en una investigación sobre las atrocidades cometidas durante la dictadura de Franco a pesar de una amnistía.
"Parece que los enemigos de Garzón tienen lo que querían", dijo Reed Brody, consejero legal de Human Rights Watch.
Pedro Nikken, presidente de la Comisión Internacional de Juristas, dijo que la combinación de casos contra Garzón dejan pensar que habría una campaña en su contra.
"Ha sido el mejor juez que ha tenido España", dijo Emilio Garrido, de 87 años, en una calle de Madrid.
"Ahora como se ha metido en la parte opuesta del gobierno que tenemos pues se lo quieren cargar, y eso es lo que paga", añadió
"Me parece muy grave y me parece el mundo del revés", dijo Begoña Antonio, de 55 años.
"La justicia está mal en España, hay restos franquistas. Me parece una pena y me produce una gran tristeza", sostuvo.