Un juez del estado amazónico de Pará (norte de Brasil) ordenó el lunes encarcelar a dos policías condenados por el asesinato de 19 campesinos sin tierra ocurrido en 1996, que hasta ahora habían evitado la prisión al presentar varios recursos de apelación.
 

El juez Edmar Pereira ordenó el lunes encarcelar al coronel Mario Colares Pantoja, condenado a 228 años de prisión por "la masacre de Eldorado dos Carajás", denominada así por el lugar donde ocurrió, y al mayor José Maria Pereira de Oliveira, condenado a 158 años, informó el Tribunal en una nota.
 

Ambos comandaban las tropas de la policía que el 17 de abril de 1996 cercaron a un grupo de manifestantes Sin Tierra que bloqueaban una carretera y les dispararon, provocando la muerte de 19 de ellos e hiriendo a 70, según datos del proceso.
 

A pesar de la condena, los dos policías consiguieron mantenerse en libertad los últimos 16 años, hasta agotar todos los recursos de apelación en instancias judiciales.
 

El Movimiento de los Sin Tierra (MST) recuerda cada año esa fecha con protestas en todo el país.
 

"Puede que con esta decisión la idea de impunidad comience a cambiar(...) porque en delitos contra campesinos en el estado de Pará, son raras las veces que los mandantes o autores son condenados y, cuando son condenados, es más raro que lleguen a cumplir cárcel", señaló en un comunicado la abogada del MST, Giane Alvarez.
 

Por su lado, la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT), vinculada a la Iglesia Católica, denunció este lunes un aumento de 15% de los conflictos en el campo motivados por disputas por la tierra y cuestiones laborales, y en especial del número de amenazados de muerte, que pasó de 125 en 2010 a 347 en 2011, la inmensa mayoría en la Amazonía.
 

"La Amazonía está manchada de sangre y esta mancha continúa expandiéndose", denunció a la estatal Agencia Brasil Laisa Santos, hermana de la dirigente campesina Maria do Espírito Santo, asesinada junto a su marido en 2011 en el estado de Pará.
 

Otra tragedia ocurrida en 2011 fue el asesinato del cacique guaraní kaiowá Nissio Gomes a manos de hombres armados y encapuchados en su aldea, según relataron las autoridades indígenas. Su cuerpo nunca fue encontrado.
 

La Comisión Pastoral de la Tierra, como los Sin Tierra, reclama una reforma agraria que otorgue tierras a los desposeídos, limitando los grandes latifundios.
 

El informe de la CPT consideró "el primer año de gobierno de la presidenta Dilma Rousseff decepcionante, con el menor número de familias asentadas desde 1995".
 

AFP