El periodo de bajas tasas de interés que a lo largo de 2013 ha beneficiado a los usuarios del sistema financiero, parece que llegó a su final, de acuerdo con las tendencias que están mostrando los mercados.
Con la decisión del Banco de la República de dejar inalterada la tasa de intervención en 3,25 por ciento en su reunión del 29 de noviembre, situación que no cambiaría este mes con la última reunión de este año, los analistas consideran que a partir del primer trimestre de 2014, van a comenzar nuevas presiones para que el rumbo de la política monetaria cambie y comience un ciclo alcista en el costo del dinero.
El jefe de investigaciones económicas de Credicorp Capital, Daniel Velandia, sostuvo que “la expectativa de que los términos de intercambio no continúen avanzando en el futuro”, una inflación que con alta probabilidad se ubicará al cierre del año cerca del piso del rango meta del Banco de la República (alrededor de 2.3 por ciento según nuestras estimaciones) y la misma dinámica de la economía global en medio de la alta incertidumbre “sobre el comienzo y la velocidad de la normalización de la política monetaria en los Estados Unidos, mantienen riesgos sobre nuestra estimación del comienzo de retiro gradual del estímulo monetario en el primer trimestre de 2014”.
Indica el experto que “esto se refleja en la diferencia entre Credicorp Capital y el consenso de mercado sobre las expectativas de tasa de interés para el final de 2014. Mientras que el consenso espera un 4 por ciento al cierre del próximo año, en Credicorp Capital esperamos que luego del inicio de la normalización de la política monetaria a finales del primer trimestre, la tasa pueda llegar hasta 4.5 por ciento”.
Sostiene el investigador que “esto está asociado a nuestra expectativa de la materialización de una mayor dinámica de la actividad económica en los próximos trimestres, tras los incrementos recientes de variables como la confianza de los agentes, la demanda de energía y los despachos y la producción de cemento”.
Añade que “de esta forma, reiteramos nuestro escenario base de una tasa repo inalterada en 3.25 por ciento hasta finales del primer trimestre del 2014, momento a partir del cual esperamos el comienzo del retiro gradual del estímulo monetario”.
“En todo caso, la probabilidad de una tasa de interés inalterada por un tiempo más prolongado al esperado no es baja, mientras que descartamos un nuevo recorte de la misma con la información disponible actualmente”.
De hecho, en los últimos dos meses la discusión entre los segmentos más dovish (prudentes) de la Junta del Emisor contra los más hawkish (severos) parece haberse desviado hacia cuándo debe subirse la tasa en lugar de si es necesario un nuevo recorte en la tasa de interés.
En este sentido, los sectores más dovish de la junta directiva plantearían la opción de mantener la tasa de política monetaria en 3.25 por ciento por lo menos hasta el segundo trimestre, si los datos económicos continúan sin mostrar una clara recuperación.
Así, el dato del PIB correspondiente al tercer trimestre de 2013, que será publicado el próximo 19 de diciembre será relevante para la trayectoria futura de la política monetaria.
Cabe recordar que el amplio rango esperado por el Banco de la República para este dato (entre 3.8 por ciento y 5.4 por ciento anual), se explicaría nuevamente por la alta incertidumbre derivada del comportamiento del indicador de inversión en obras civiles, cuya publicación será el próximo 11 de diciembre.