La secretaria de Gobierno de Cundinamarca, Adriana Ramírez Suárez, encabeza a esta hora el Comité Local de Prevención de Atención a Desastres –CLOPAD- que se realiza en Cota, luego del rompimiento del jarillón que protegía la vereda Parcelas, en el río Chicú, lo que ocasionó inundaciones y afectaciones a la población de la región.
El CLOPAD cuenta con la participación del director de la CAR, Édgar Bejarano y del alcalde (e) Milciades Ospina quienes en compañía de miembros de la Policía, Ejército, Bomberos, Defensa Civil y representantes de la comunidad, establecen planes de mitigación a la ola invernal que afecta la región.
La secretaria de Gobierno, de acuerdo con las instrucciones impartidas en ese sentido por el gobernador Álvaro Cruz, recorrió en lancha el sector para conocer de primera mano las consecuencias de la inundación causada por el desbordamiento del río Chicú, uno de los principales afluentes del río Bogotá.
De acuerdo con los reportes de las autoridades, siete (7) familias resultaron afectadas; 250 hectáreas inundadas, 200 reses y 80 caballos reubicados. Las familias damnificadas recibieron ayudas humanitarias y se encuentran albergadas en la Institución Educativa de Parcelas.
Vale la pena destacar que el director de la CAR, Édgar Bejarano, advirtió que quien intervenga cualquier jarillón, será sancionado con una multa equivalente a 5000 Salarios Mínimos Vigentes. De otra parte, el CLOPAD solicitó restricción vehicular para el ingreso de vehículos con escombros y material de relleno.