Mañana se celebra el Día Internacional de esta práctica que ha superado terapias y medicinas para encontrar el equilibrio emocional. Entre sus beneficios está que mejora la densidad ósea previniendo la osteoporosis y las funciones digestivas.

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Desde el año 2014, la Organización de Naciones Unidas designó el 21 de junio como el Día Internacional del Yoga, con el fin de reconocer su popularidad universal y resaltar las ventajas de esta actividad, considerada beneficiosa para la salud de la población mundial. Como indicó el primer ministro indio, Narendra Modi, en un discurso durante la 69 sesión de la Asamblea General, “el yoga representa la unidad de la mente y el cuerpo, el pensamiento y la acción; no se trata solo de ejercicios, se trata de una manera de descubrir el sentido de identidad de uno mismo, el mundo y la naturaleza”. 

El yoga tiene su origen en India, sin embargo la fecha de su creación no está clara, algunos suelen decir que inició hacia el año 5.000 a.C. pero no hay datos fiables que lo confirmen. Lo cierto es que el yoga es más que una actividad física, se considera una práctica para todo tipo de personas, sin importar edad o género, que proporciona un poderoso bienestar tanto físico como mental en quienes la realizan.

EL NUEVO SIGLO consultó con Susana Sánchez, entrenadora personalizada de Bodytech y especialista en esta disciplina, quien nos recomienda algunos beneficios que las personas obtienen al realizar yoga:

1.    Mejora el sistema nervioso manteniendo la tranquilidad sobre situaciones de estrés.

2.    Mejora la flexibilidad a nivel muscular y articular, disminuyendo dolores corporales.

3.    Corrige, mejora y mantiene una buena postura corporal.

4.    Fortalece el sistema inmune y la capacidad respiratoria a través de las “asanas”  (posturas) y el “Pranayama” o técnicas de respiración.

5.    Mejora la densidad ósea, previniendo la osteoporosis.

6.    Mejora la circulación sanguínea a través de la combinación de movimientos y posturas dinámicas o estáticas. 

7.    Mejora el equilibrio, la propiocepción y la estabilidad de todo el cuerpo.

8.    Mejora las funciones digestivas, gracias a las diferentes posturas de torsiones que se realizan.

9.    Reduce los dolores de fibromialgia, artritis y dolencias de tipo muscular y articular.

10.    Potencia el desarrollo del cerebro, debido a la práctica de la meditación, hay mayor trabajo de la memoria, concentración, y mejor reacción a los problemas que se presentan.

11.    Contribuye a la sanación y el manejo de todo tipo de emociones negativas, y desequilibrio emocional.
“El yoga me cambió la vida”

Catalina Marulanda, antropóloga bogotana, comenzó a practicar el yoga desde hace aproximadamente 6 años, tiempo en el cual asegura le cambió la vida, “empecé a practicar yoga de manera irregular hace aproximadamente 6 años. Haciendo clases por Youtube y asistiendo a algunos lugares donde impartían clases en España e Inglaterra que era donde vivía por esa época. La práctica se hizo más regular en el 2013 con algunos DVDs de Hatha Yoga. En el 2016 a principios de año empecé a hacer kundalini yoga y en mayo me animé a tomar un curso que se llamaba ‘La puerta de la meditación’ en una escuela de yoga, que su fuerte es el kundalini yoga. A través de la meditación me animé a asistir a un retiro de yoga y silencio que organizaba la misma escuela y fue en ese retiro que me enamoré del kundalini yoga. Esta experiencia me motivó a empezar una formación como profesora de yoga y actualmente llevo un año de curso”, afirmó. 

Marulanda asegura que su vida es otra luego de haber conocido el yoga, “el yoga me ha llenado de amor y tranquilidad. Me cambió la vida, ahora me siento pacífica y con ganas de servir y amar todo”.

Pero, ¿y por qué el yoga logra lo que ninguna otra terapia de relación o medicinas recetadas se recomiendan para encontrar dicho equilibrio emocional?, Catalina afirma que “el Kundalini yoga es un yoga muy meditativo, y algunas veces he tenido experiencias en las que me cargo de mucha energía. Encuentro lugares de silencio y paz en mi mente, que me llenan de tranquilidad. Algunas veces he tenido visiones, en su mayoría son ojos que me miran. Alguna vez he sentido que mi cuerpo se estira, como si fuera de plastilina y mis piernas se hunden en el mar y mi coronilla se proyecta y se acerca al cielo. Es una sensación en la meditación, nada sobrenatural”.

El yoga fue inscrito el pasado jueves en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, anunció la Unesco. 

 

Además de los diferentes beneficios mentales, emocionales y de salud, la realización regular de esta práctica también proporciona cambios estéticos favorables como la eliminación de la grasa sobrante en el abdomen, esto al desintoxicar el cuerpo y al ser conscientes de una mejor alimentación. Las posturas que se trabajan en el yoga contribuyen a bajar progresivamente la barriga y mejorar la postura de la espalda para que nunca más vuelva a salir. 

Finalmente, la entrenadora Sánchez comparte tres posturas importantes de esta práctica:

1.    Postura del Guerrero = Fortaleza

2.    Postura del Árbol = Equilibrio

3.    Postura de Cadáver = Sedante – Relajante

Yoga con cabras, la última moda en EU

Adonna Ebrahimi se estira en su colchoneta de yoga tratando de mantener bien o mal la postura de la cabra, y la compostura, mientras un par de cabras se balancean en su espalda.

Bienvenidos a "Yoga con cabras", el último grito de la moda en Estados Unidos: jóvenes y viejos hacen fila para participar de estas populares clases que dejan a los participantes no sólo diciendo "namaste" sino riendo a carcajadas. Parece más el patio de una escuela.

La nueva modalidad se realiza en granjas a lo largo del país con cabras enanas nigerianas (pequeños chivos de África occidental), que se pasean entre los practicantes de yoga mientras ejecutan su rutina.

Unas 20 personas y 15 cabras -11 crías y cuatro madres- participan de esta clase organizada al aire libre.

"Exhalen", "contraigan el abdomen contra la columna", "cuidado con la postura"... Las instrucciones de Meridith Lana se mezclan con el balido de los animalitos, que saltan sobre las espaldas de los alumnos, mastican sus cabellos y barbas y lamen sus caras. 

"Es simplemente liberación de la tensión, de la frustración", estima Judy Waters, que fue a la clase con su esposo y otros amigos. "No puedes estar de mal humor cuando tienes un montón de cabras bebés alrededor trepándose por allí y repartiendo ternura", sigue.

Patrimonio de la Humanidad ante la Unesco

El yoga fue inscrito el pasado jueves en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, anunció la Unesco. La decisión fue tomada por la undécima asamblea de la Unesco reunida desde el 28 de noviembre al 2 de diciembre en Adís Abeba (Etiopía).

"La filosofía subyacente a la antigua práctica del yoga en India ha influido en numerosos aspectos de la sociedad de ese país, que van desde la salud y la medicina hasta la educación y las artes", indicó la organización con sede en París.

"Basado en la unificación de la mente, el cuerpo y el alma" la práctica del yoga mejora "el bienestar mental, físico y espiritual de las personas", agregó la Unesco.

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