Por Helena Villamizar García-Herreros
Especial para EL NUEVO SIGLO
Esta semana nuevas turbulencias en las bolsas mundiales fueron noticia de primera plana. Una vez más la crisis griega estaba en el centro de estos acontecimientos acompañada por resultados electorales en países del viejo continente que generan un marco de incertidumbre sobre la unidad europea.
La crisis griega, sobre cuyo ajuste y repercusiones el mundo ha estado expectante, es en palabras de Dani Rodrik: “una manifestación más de lo que he llamado 'el trilema político de la economía mundial': globalización económica, democracia política y Estado-nación, son mutuamente irreconciliables. Podemos tener a lo sumo dos al mismo tiempo”1/ El caso griego representa hoy una evidencia aún más vívida de esta fractura fundamental entre dichas condiciones.
“La democracia es compatible con la soberanía nacional sólo si restringimos la globalización. Si presionamos por la globalización manteniendo el estado-nación debemos abandonar la democracia” afirma Rodrik. Y éste a todas luces ha sido el camino seguido por Grecia al aceptar las condiciones de un ajuste profundamente recesivo, dictado por la troika FMI, el Banco Central Europeo –BCE- y la Unión Europea UE-, como condición de permanecer en la unión monetaria e implícitamente en la UE. Las características del ajuste corresponden a una globalización que privilegia los intereses del capital financiero y constituyen un plan de salvamento de los bancos y no de Grecia, como lo reconocen connotados economistas.
La tercera senda del “trilema” señalada por Rodrik es abolir completamente la soberanía nacional manteniendo políticas democráticas mediante la integración, de manera similar a como opera el federalismo. Pero la Unión Europea está muy lejos de dicha alternativa de integración. Grecia no tiene acceso automático a un prestamista de última instancia, ni recibe seguros de desempleo como le ocurre a California en Estados Unidos y debido a diferencias lingüísticas y culturales tampoco existe una verdadera movilidad laboral en la UE, condición esencial de una unión monetaria óptima que permita facilitar los ajustes mediante migraciones de estados en dificultades hacia estados en auge. 1/
Los sacrificios
La globalización de Grecia mediante la Unión Europea le ha impuesto elevados sacrificios brindando elocuente evidencia sobre el mencionado trilema y sobre el fracaso del plan de ajuste recesivo, el cual había sido pronosticado por Stiglitz, Krugman, Rodrik, Roubini, entre otros destacados economistas.Existe creciente incertidumbre sobre la resolución del trilema y cada vez es más concebible que Grecia abandone el euro, como ocurrió con el patrón oro en el mundo.
El resultado inequívoco de esta globalización ha sido la pérdida de democracia, manifiesta no sólo en el inmenso sacrificio del pueblo griego opuesto a esta vía de “salvamento” económico, expresado en violentos disturbios, así como en la derrota electoral de los partidos que apoyaron dicho Paquete y en la reciente imposibilidad de lograr una coalición para conformar un gobierno, lo que ha llevado a la convocatoria de nuevas elecciones en junio. Igualmente el ascenso de un partido neonazi que conquistó 21 escaños del parlamento revela los peligros de la pérdida de democracia en Grecia y evoca las gravosas reparaciones de guerra impuestas a Alemania en el tratado de Versalles y sus lamentables consecuencias para el mundo. Hoy Europa tiembla por una crisis mal resuelta donde los intereses de la globalización a la medida del capital financiero están asfixiando al pueblo griego.
La historia económica, dice Rodrik, dejó importantes experiencias del trilema político, como el abandono del patrón oro después de la llamada primera era de globalización que finalizó en 1914, cuando las tensiones y disyuntivas entre los objetivos económicos internos y las reglas y restricciones externas, dadas por el patrón oro y por la libertad de capitales, determinaron el abandono de dicho sistema monetario El caso clásico, fue el corto restablecimiento del patrón oro en Inglaterra con posterioridad a la primera guerra mundial y hasta 1931 cuando finalmente en dicha tensión prevaleció la recuperación interna dando fin al patrón oro.1/
Los arquitectos de Bretton Woods aprendieron la lección: “Ellos entendieron que los países democráticos necesitan espacio para conducir políticas monetarias y fiscales independientes. Así ellos contemplaron sólo una globalización “delgada” con flujos de capital mayoritariamente restringidos a endeudamiento y préstamos de largo plazo. John Maynard Keynes, quien escribió las reglas con Harry Dexter White, concibió los controles a los capitales no como un expediente temporal sino como una característica permanente de la economía global.” Estas reglas fueron borradas con el derrumbe del sistema de Bretton Woods en los años setenta.1/
Experiencias
A partir de allí múltiples experiencias de crisis -cada vez más frecuentes y profundas- y enormes sacrificios experimentados por diversos países que perseveran en unas reglas de globalización asimétrica y absurda han dejado dolorosas lecciones. La probada imperfección de los mercados financieros llevó a más de doscientos cincuenta reconocidos académicos mundiales a pronunciarse categóricamente contra la liberalización de capitales impuesta por Estados Unidos y el capital financiero internacional a través de TLC y tratados bilaterales de Inversión con esta nación, mediante una carta dirigida a Hillary Clinton, Secretaria de Estado, Timothy Geithner Secretario del Tesoro y Ron Kirk Embajador de la Oficina de comercio de Estados Unidos. 2/
La lectura de esta carta contribuye a entender la dimensión de la entrega hecha por los gobiernos Uribe y Santos en la aprobación del TLC con Estados Unidos, en el cual, como he enfatizado en estas páginas, entre los muchos perjuicios, Colombia renunció a la imprescindible cláusula de balanza de pagos y consagró la liberalización de capitales. Estas graves renuncias a la soberanía macroeconómica irremediablemente conducirán al país por el doloroso camino de Grecia, España e Irlanda, y a graves pérdidas reales de democracia en futuro eventos de crisis o dificultades externas.
1/http://www.project-syndicate.org/commentary/greek-lessons-for-the-world-economy 2/http://online.wsj.com/public/resources/documents/CapCtrlsLetter013111.pdf