El Real Madrid, tras pulverizar al Bayern Múnich (4-0), está a un partido de añadir la décima Copa de Europa a su palmarés, obsesión desde hace 12 años, cuando Zinedine Zidane llevó la novena a las vitrinas blancas con una volea histórica en Glasgow contra el Bayer Leverkusen.
Un entrenador experto y sosegado, lejos de las estridencias de su antecesor José Mourinho, una defensa muy segura y un ataque demoledor han sido la receta del Real Madrid para dejar al Bayern Múnich sin el sueño de convertirse en el primer equipo en revalidar el título en la Liga de Campeones.
El técnico italiano Carlo Ancelotti, discutido al comienzo por la fragilidad defensiva, ha ido corrigiendo los defectos del equipo en su primera temporada al mando y ha llegado con un grupo vistoso y en forma a la recta final.
"Hemos hecho un trabajo defensivo fantástico. Hemos logrado que el defensor del título no marque en 180 minutos", dijo el martes el lateral derecho Dani Carvajal.
Los frutos del trabajo de Ancelotti comienzan a llegar y el Real Madrid ganó hace dos semanas la Copa del Rey (2-1 ante el Barcelona) con una exhibición en el gol decisivo del galés Gareth Bale, incorporación estrella del pasado verano y discutido en algunos momentos de la temporada.
El exatacante del Tottenham y el argentino Ángel Di María jugaron en las bandas el martes y tuvieron un rol más defensivo que el habitaul, tapando las salidas de los lateral del conjunto bávaro.
La solidaridad del equipo blanco hizo el resto, con un centro de la defensa experto y atento formado por el portugués Pepe y Sergio Ramos, autor de un espectacular doblete de cabeza. En la portería estuvo el capitán Iker Casillas, titular en 'Champions' y en Copa, mientras que en la Liga lo es Diego López.
"El equilibrio es la clave del fútbol. Mientras que en la primera parte de la temporada marcamos muchos goles pero también los recibimos, ahora el trabajo ha dado sus frutos", dijo Ancelotti.
-Atacantes como cohetes-
De los cinco goles marcados en la eliminatoria contra el Bayern Múnich, dos fueron logrados al contraataque y tres en jugadas a balón parado, lo que explica la eficacia ofensiva del Real Madrid, que será uno de sus puntos fuertes en la final del 24 de mayo en Lisboa.
Como ocurrió en el tercer gol del Allianz Arena, la BBC (Bale-Benzema-Cristiano), poco utilizada en abril por las lesiones de sus miembros, tendrá que funcionar a la perfección para entregar la décima al Real Madrid.
El francés Karim Benzema fue el único goleador de la ida (1-0), mientras que Ronaldo hizo un doblete en Alemania que le otorgó el récord realizador en una temporada de Copa de Europa, con 16 tantos.
"Estoy muy contento de haber batido este récord en la Liga de Campeones pero lo que yo quiero es ganarla", dijo Ronaldo.
-Ancelotti, el hábil ingeniero-
En los tres años que Mourinho estuvo al frente del Real Madrid (2010-2013) el equipo cayó siempre en semifinales de la Liga de Campeones. Ancelotti ha dado un paso más en su primera temporada.
"Lo ha cambiado todo, la mentalidad, todo", reconoció Ronaldo el martes sobre su entrenador.
De hecho el italiano recogió un vestuario exhausto tras el paso del portugués y ha logrado que todos los jugadores se impliquen en el proyecto tomando incluso decisiones controvertidas, como la titularidad de Casillas sólo en la Copa y en la 'Champions'.
El técnico, doble campeón de la Liga de Campeones con el Milan (2003 y 2007) ha dado confianza a los jugadores. Bien secundado por su adjunto Zinedine Zidane, Ancelotti está a un partido de entrar en la historia blanca.
"Tengo la suerte de entrenar al club más importante del mundo y debo hacer todo lo posible por obtener los mejores resultados. Agradezco a los jugadores porque doce años después el Real jugará la final y es una buena noticia para todo el mundo", dijo Ancelotti el martes.