Aunque la producción de petróleo en Colombia en marzo cayó por debajo del millón de barriles, producto de los atentados terroristas a los oleoductos, el país tiene un excelente panorama en este sector.
El viceministro de Energía, Orlando Cabrales, manifestó que en el tercer mes del año la producción fue de 977.000 barriles por día. Hay que recordar que en enero fue de un millón 14.000 barriles y en febrero un millón 7.000 barriles por día.
Sin embargo manifestó que el Gobierno mantiene en firme la meta de un millón de barriles por día en promedio al cierre de 2014.
Precisamente, un estudio de la Unidad de Planeación Mineroenergética (UPME), señala que el país tiene un enorme potencial en zonas de explotación de crudo pesado y shale oil o aceite de esquisto bituminoso.
De acuerdo con los informes, existen áreas para ser descubiertas y desarrolladas en el mediano y largo plazo, que incluyen más de 13 mil millones de barriles de crudo en los próximos 20 años.
El Gobierno señala que una característica de la prospectividad de Colombia es la importante participación de todas las cuencas (maduras y fronteras) en la materialización del potencial.
A partir del análisis de la infraestructura se estimaron las necesidades de inversión del orden de 6.000 millones de dólares anuales por los próximos 10 años, incrementándose a más de 9.000 millones de dólares por año entre los años 2022 a 2030 para el desarrollo de los combustibles no convencionales. Indica el estudio que en lo referente a los nuevos combustibles, el Gobierno estima que el país tiene un potencial alto y llamativo para los posibles inversionistas.
En gas es posible que con el desarrollo del metano asociado al carbón que se encuentra en las minas de Cerrejón y Drummond se puede casi triplicar las actuales reservas del país que ascienden a 7,5 perapies.
De acuerdo con la entidad estatal, en el primer período se contemplan inversiones en desarrollo, en la construcción de un mejorador de 300.000 barriles diarios que comienza a operar en 2017 para lo cual se estiman recursos por 3.700 millones de dólares y la construcción del oleoducto del Pacífico por un monto de 2.200 millones de dólares, señala el informe.