Desde la Plaza de San Pedro en el Vaticano el Papa Francisco en mensaje enérgico se pronunció contra las guerras, en especial la que se libra en Siria y fue contundente su rechazo a cualquier intervención militar en el país árabe.
El Papa está del lado de los que se oponen a un ataque de Estados Unidos, donde el presidente Obama espera que el Congreso le dé vía libre a la ofensiva contra el régimen sirio. El argumento para intervenir es el del probable uso de armas químicas contra la población civil por parte del gobierno de Bashar al Assad. En Damasco el mandatario niega que fuerzas oficiales hayan utilizado gases o elementos químicos.
Por principio y doctrina la Iglesia no acepta ninguna guerra. Y el Papa Francisco es enfático respecto del propósito de la Casa Blanca de lanzar una ofensiva posiblemente con misiles. En su alocución el Papa Francisco se pregunta si de verdad la guerra es por problemas o para vender armas en el comercio ilegal. Con sus palabras, el Pontífice quiere convocar a la humanidad a hacer posible un mundo en paz, y un no rotundo a acciones militares contra Siria.