El marcado interés del presidente Santos de cooptar para sí la todopoderosa Asociación Nacional de Industriales (ANDI) es una posibilidad que tiene a muchos empresarios independientes con los pelos de punta.
Los gremios privados siempre han estado ahí para decirle al Gobierno con abierta franqueza las cosas que no le puede manifestar un empresario individualmente. Son, inequívocamente, un seguro que tiene el capital a largo plazo. Estas organizaciones no son entidades de lobby ante el Congreso, el Ejecutivo central o las altas Cortes y como tales deben comportarse. De allí la preocupación latente por la manera como se pretende elegir en la cabeza de la ANDI al sucesor de Luis Carlos Villegas.
Los dos candidatos. La Barca estableció en fuentes fidedignas que en este proceso el alto Gobierno viene tratando de intervenir en el muy influyente Sindicato Antioqueño con el tema de Isagen de por medio. Para el efecto tiene ya sus cartas marcadas. Se trata de los incondicionales Gabriel Silva Luján y Bruce MacMaster, dos almas gemelas del poder ejecutivo.
El empeño santista. El afán del Jefe de Estado es tener el más completo control del empresariado, puesto que los demás frentes ya están de su lado: el tema de los trabajadores ya lo tiene resuelto con una palomita presidencial al dirigente sindical Angelino Garzón; al Congreso con una buena dosis de mermelada y a las altas Cortes con mantener las cosas como están; la prensa, amordazada, en unos casos y comprada, en otros. Los únicos instrumentos de poder que le quedan fuera del redil son la Procuraduría y la Contraloría.
Pekerman en la mira. Olvidábamos señalar que el presidente Santos también pretende cooptar por la vía del halago al exitoso técnico argentino de nuestra Selección Nacional, José Néstor Pekerman, ofreciéndole la nacionalidad colombiana, condición a la que puede acceder cuando a bien tenga por el hecho de que Vanessa, su hija mayor, haya nacido en la ciudad de Medellín, en 1975.
La oferta se la hizo tras la gloriosa gesta del combinado patrio, en los camerinos del estadio, durante la bulliciosa celebración de la clasificación al Mundial Brasil 2014, tras una vigilia de 16 años.
Volvamos a la ANDI. En el campo gremial se evocan las épocas pretéritas de hombres que hicieron historia en la ANDI como don Ignacio Betancur Campuzano, primero, y don Fabio Echeverri Correa, después. El segundo puso el punto más alto en la historia de esa entidad. Se le recuerda por su carácter, temple y coherencia. Ojalá ahora se piense en grande con una figura de peso en la industria nacional como el exgerente de las Empresas Públicas de Medellín, Federico Restrepo, considerado el único y verdadero sucesor del mítico don Diego Calle Restrepo.