En infraestructura vial el país requiere avances importantes para superar el rezago en área fundamental para la competitividad, más aún frente a las exigencias de mayor movimiento de mercancías tanto de importación como de exportación. Ahora se imponen las autopistas de última generación, las dobles calzadas. Todo el territorio nacional debe quedar interconectado mediante un sistema de carreteras que responda a los retos actuales.
Una de las regiones más promisorias es la de los Llanos Orientales. Despensa agrícola y ganadera. Entre las prioridades de obras públicas que desde hace muchos años ha estado en los primeros lugares es la carretera a Villavicencio. Al principio la vía era de precarias condiciones. Muchos accidentes ocurrieron que ocasionaron graves tragedias. En época posterior se construyó una con especificaciones técnicas de la moderna ingeniería, que incluyó varios túneles y viaductos. Siempre de tráfico intenso que sigue aumentando por el desarrollo de la capital del Meta y el Departamento. Las necesidades de hoy de mayor flujo de vehículos exigían otra vía más amplia. No obstante se decidió construir un tramo de 27 kilómetros, cuyos trabajos se han adelantado con celeridad. Tendrá 50 puentes y viaductos, de longitud de más cinco mil doscientos metros.
Se trata de la ampliación de la segunda calzada, proyecto que se desarrolla a toda marcha, ya con el 65 por ciento construido. Los nuevos 18 túneles se estrenarán en febrero de 2015. La totalidad de este corredor, según el concesionario encargado de las obras, se entregará en el tiempo acordado, es decir, en diciembre de 2016. Se sabe que la mayoría de túneles empezará a operar en febrero del próximo año, sin embargo, resta concretar propuesta de una asociación público-privada, que ya se discutió, para asegurar la complementación de la doble calzada en los tramos uno y tres, que no se estableció en el contrato original.
Es obvio que los usuarios y la nación requieren doble calzada en todo el recorrido, y así debe ser, es indispensable. Una vez terminada la obra, con los nuevos túneles y puentes y de calzada doble todo el trayecto, serán muchos los beneficios por el ahorro de tiempo entre Bogotá y la capital del Meta.