La Corporación AutónomaRegional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga y el Ministerio de Minas y Energía, informan que el 82.1 por ciento de las 11.700 hectáreas que conforman el Parque Natural Regional de Santurbán, tienen títulos mineros que están en poder de poderosas multinacionales, de empresas colombianas y particulares. Lo que significa que bajo el predominio de los mineros se encuentran 9.612,22 hectáreas. Entre las multinacionales se destacan dos: que son las que más terrenos tienen en el Parque, están Eco Oro, con 6.199,84 hectáreas de 7 títulos mineros, le sigue la Continental Gold. Según algunos expertos las multinacionales estarían amparadas en determinados casos por las reglas del TLC en cuanto se refiere a inversión extranjera. Lo que les da una enorme ventaja comparativa frente a los inversionistas locales y los particulares. No se dice en el informe cuántos trabajadores se vincularían al proyecto, ni la clase de maquinaria que se utilizaría, ni se mencionan los químicos que se emplean, como el mercurio.
Los habitantes de Bucaramanga y de otras regiones de Santander reaccionaron en el pasado con resolución en defensa del medio ambiente cuando se hizo público que la empresa Eco de Oro se proponía la explotación a cielo abierto con el proyecto Angostura, el cual contemplaba producir 2,3 millones de onzas de oro al año. La noticia produjo la indignación colectiva entre los ambientalistas de todo el país, quienes señalaron que dicho proyecto significaría la virtual destrucción de gran parte del medio ambiente, la contaminación de las aguas y un atentado contra la región. En tanto el Ministerio de Minas coteja la información y verifica la titulación, con la finalidad de regular la situación.
A su vez, El Espectador informa que: “ Para disgusto de quienes pretenden llevarse todo el oro, y beneplácito de quienes han defendido el agua y la vida, ayer finalmente fue declarado el nuevo Parque Natural Regional Páramo de Santurbán. Así lo anunciaron el ministro de Ambiente, Juan Gabriel Uribe Vegalara, y la directora del Instituto Alexander von Humboldt, Brigitte LG Baptiste, quienes, luego de una sesión del Consejo Directivo de la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CMDB), manifestaron por unanimidad que el nuevo parque tendrá un área protegida de 11.700 hectáreas y no de 10.890 -como pretendía la CDMB-, adicionándole 600 hectáreas correspondientes al Distrito de Manejo Integrado (DMI). Y el mismo diario afirma que el ministro Juan Gabriel Uribe, al explicar las razones que lo llevaron a ampliar el área del parque, que atendiendo las alarmas y precisiones técnicas que hizo el Instituto Humboldt, llegó a la conclusión de que: “era un error no tener en cuenta los ecosistemas de robledales de la zona, y en ese sentido yo pedí incluir todo el ecosistema”. “Será un parque de mucho mayor espectro que el que se tenía antes”, dado que se establece la protección del bosque alto andino de Suratá, Cachirí y un sector comprendido en el DMI. Y estuvo enfático en cuanto a señalar que en el área del Parque Páramo de Santurbán ya no se permitirán la exploración ni la explotación minera. “En esas 11.700 hectáreas no se podrá hacer absolutamente nada de eso”, recalcó. El ministro en cuanto a su compromiso con la región sostuvo que: “esto es lo máximo a lo que se ha podido llegar consultando a todas las regiones y los diferentes intereses. La comunidad santandereana quería su parque, que se protegiera el recurso hídrico y el ecosistema de robledales y las especies endémicas, y eso es lo que hemos hecho como nuestro legado conservacionista. Este es un ecosistema prácticamente único en Colombia”. Se desconoce cuántos títulos mineros quedarán sin vigencia. El ministro Uribe confesó que con la decisión de salvaguardar el medio ambiente en esa zona su “conciencia queda mejor que lo que estaba antes. Hemos hecho un esfuerzo de concertación, de unanimidad, con los municipios, las regiones y la Nación, porque eso es lo que hay que hacer desde el punto de vista de política de Estado. Hemos dado un ejemplo y estamos mandando una señal al país de que esto no se trata de una pelea de unos contra otros, sino de generar consensos en torno de propósitos nacionales y regionales”. En cuanto a los aspectos técnicos de la delimitación del parque explicó el ministro que: Falta por definir a partir de qué altura sobre el nivel del mar se determina la línea de páramo, la cual a su vez servirá de base para aplicar en los 32 complejos de páramo con que cuenta Colombia y que suman más de un millón de hectáreas. “La estandarización y el protocolo es lo que vamos a trabajar en estos primeros meses”.