PESE QUE el presidente Gustavo Petro confirmó que falta un incremento al precio de la gasolina y celebró que se ha cerrado la brecha de precio y se haya acabado el subsidio por ese combustible, no dijo nada respecto a lo que sucederá con los precios del diésel.

En su cuenta de X mencionó: “Hemos logrado cerrar la brecha de precio y acabar el subsidio a la gasolina. Nos espera un último incremento y a partir de allí el precio fluctuará con los vaivenes del precio internacional”.

Frente a las subidas que se han venido haciendo efectivas en los últimos meses, el presidente Petro agradeció la “paciencia” de la población, aunque hizo un llamado para que se deje de hacer uso de combustibles fósiles.

“Agradezco la paciencia y buena voluntad de la capa poblacional que consume esta mercancía, el cierre de la brecha mejorará la estabilidad fiscal del Estado. Sugiero abrir los caminos de la transición de la movilidad hacia medios que no usen combustibles fósiles”, sostuvo.

Reservas

Consultado por EL NUEVO SIGLO, un experto en el sector de hidrocarburos y quien prefirió mantener la reserva de su nombre, dijo que “preocupa que el gobierno no se haya referido a lo que va a suceder con los precios del diésel, teniendo en cuenta que todavía queda un déficit de $ 16,1 billones que se debe cubrir en 2024”.

Sin embargo, mencionó que hace poco el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, dijo que a partir de febrero del año entrante comenzarían las alzas en el diésel. “La idea del ministro Bonilla es que ese descuadre se debe empezar a bajar y que al menos se requerirán de por lo menos 12 meses para cubrirlo. Sin embargo, esa es una de las decisiones más complicadas para el gobierno, toda vez que ese aumento va a golpear el transporte de carga y, por consiguiente, al valor de los alimentos, lo que puede ser negativo para la inflación”, sostuvo la misma fuente.

De acuerdo con las cuentas que maneja la fuente, con el último aumento de la gasolina en enero, se cubriría el faltante de $ 1,3 billones que queda por saldar para cerrar la brecha que dijo el presidente Petro.

Sin embargo, ayer se esperaba que alguna fuente del Gobierno se refiriera a lo que va a suceder en definitiva con los precios del diésel.

Propuesta

Sin embargo, los transportadores han insistido en proponer al gobierno una medida denominada Precio Colombia para calcular el precio del ACPM (diésel) como alternativa a los actuales precios basados en la paridad internacional. Esta propuesta busca ajustar el precio del diésel al contexto económico nacional, considerando que Colombia es autosuficiente en la producción de este combustible y que la importación representa tan solo un 5% del consumo interno.

Contempla la eliminación de impuestos (el nacional y dos IVA) y toma como base el ingreso al productor y el ingreso al productor de biodiésel. Esto, teniendo en cuenta que en la actualidad el cálculo se hace con el ingreso al productor (90%), ingreso al productor de biodiésel (10%), logística (distribuidor mayorista más distribuidor minorista y transporte y los impuestos (el nacional y dos IVA).

La propuesta de Colfecar sostiene que se deben contemplar los costos reales de producción y operación, permitiendo así a Ecopetrol continuar sus inversiones y asegurar el abastecimiento.

Impacto

De acuerdo con el analista Julio César Vera, presidente de Xua Energy, señaló que “el problema del diésel hoy es el principal problema del déficit del Fondo de Estabilización, dado que no solo es el 45% de la demanda nacional de combustibles dicho producto, sino que, además, su diferencial de precio con el valor internacional es hoy mayor que en la gasolina”.

Por esta razón, Vera estima que el diferencial del galón de este carburante es de $ 5.600 por galón, antes del IVA. No obstante, afirmó que es una brecha que se ha venido cerrando gracias a la caída de la tasa de cambio “y la época del año, cuando el diésel cae de precio frente a la gasolina”.

Por este motivo, cada mes de consumo de este le cuesta al fisco $ 1,05 billones según los cálculos del presidente de Xua Energy.

Es de esta manera que Vera señala que ya se necesitan señales de incremento para iniciar a corregir el diferencial en los precios.

Cuando se habla de los incrementos en el precio de los combustibles, el Gobierno destaca que uno de los motivos para mantener estable el ACPM es su impacto en el transporte y, por ende, en el precio de los alimentos. Vera señaló que esto también se evidencia en el caso de la gasolina.

Cabe destacar que dentro de los motivos que ha esgrimido Hacienda y el Ministerio de Minas y Energía para no hacer las alzas en este combustible está el impacto que puede tener en la inflación hacerlos al mismo tiempo.

Las cuentas

Por otra parte, en las cuentas del Comité Autónomo de la Regla Fiscal (CARF), se estima que este año el déficit de este fondo oscile entre $ 18,5 billones y $ 20 billones, teniendo en cuenta que el 73% sería por el diésel. Este monto, si bien es inferior al visto el año pasado cuando fue de $ 36,7 billones, es muy similar a otras destinaciones de subsidios.

Andrés Velasco, director técnico del CARF, explicó que esta actualización en su expectativa de deuda se da por la nueva posibilidad de precios de petróleo que presentó el Ministerio de Hacienda en el marco fiscal de Mediano Plazo, que espera que sea de US$ 78,6 por cada barril de Brent. Así mismo, apuntó que será la tasa de cambio la que afecte en mayor o menor medida el déficit que se genere.

Igualmente, por cuenta de la decisión de no hacer incrementos al precio del diésel, el principal causante de la deuda acumulada de este año será este combustible. De acuerdo con Andrés Velasco, director técnico del CARF, el monto será de unos $ 16,5 billones.

Sin embargo, destaca que por esto la corrección en el subsidio es solo parcial y el problema se está afrontando parcialmente. No obstante, resaltó la importancia de esto para no afectar de forma muy brusca el poder adquisitivo de los hogares.

¿Y el plan para aumentar el valor a las empresas?

La semana pasada, el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Hacienda, dijo que podría aumentar el precio del galón del diésel para las grandes compañías del país. Al parecer, la medida aplicaría para cerca de 190 compañías que operan en Colombia.

Con el nuevo lineamiento, el galón de diésel pasaría de costarle a las grandes compañías de $ 9.000 a $ 16.000. De acuerdo con el borrador del decreto, dichas empresas no se beneficiarían del subsidio a los combustibles.

El aumento aplicaría para “grandes consumidores y aquellos consumidores finales que consuman promedio anual más de 20.000 galones al mes (...) independientemente de su consumo por instalación o punto de entrega”.

El Ministerio de Hacienda, sin embargo, aclara en el borrador de decreto que este mecanismo no aplicaría para las empresas de transporte público ni a los transportadores de carga ni a las empresas generadoras de energía en Zonas No Interconectadas (ZNI).

De acuerdo con el documento, serán los Ministerios de Hacienda y Energía los encargados de establecer “mediante acto administrativo, el procedimiento a seguir para la determinación del precio paridad internacional que deberá ser utilizado como ingreso al productor dentro del mecanismo diferencial definido en el presente articulado”.