Los emprendimientos como parte de su estrategia para la reactivación económica apostaron por fortalecer su presencia en los diferentes canales digitales.
María Fernanda Quiñones, presidenta ejecutiva de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico, destaca que: “Cuando las pequeñas y medianas empresas (Pymes), participan del eCommerce cuentan con un motor fundamental para su actividad, que permite ampliar los mercados, disminuir las barreras de inclusión financiera, los costos operativos, la intermediación, además sirve como un reactivo para incrementar la competitividad y la eficiencia operativa”.
Colombia ha visto un avance positivo en la adopción del comercio electrónico; sin embargo, aún los pequeños y medianos comercios necesitan formarse y desarrollar habilidades en aspectos complementarios al negocio. Los emprendimientos son cada vez más conscientes de que la digitalización trae enormes beneficios y oportunidades de crecimiento como el aumento de la eficiencia, la reducción de costos, el fortalecimiento de la operación y la optimización en el manejo del tiempo.
Según cifras de Procolombia, las pymes generan cerca del 70% de los puestos de trabajo a nivel nacional; sin embargo, tan solo el 14% han exportado sus productos o servicios. Abrir sus canales a una oferta digital permite llegar a otros mercados, aprovechando las alianzas para exportar sus productos y llegar a nuevos destinos en un mercado global con grandes oportunidades.
Según el informe de la Asociación Colombiana de Emprendedores el 35% de estos proyectos están liderados por una mujer. Incentivar programas y espacios enfocados en promover su actividad en el comercio electrónico, servirá como un motor para la reactivación económica del país.
“Desde la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico reconocemos el esfuerzo y la resiliencia que las pequeñas y medianas empresas han tenido ante esta coyuntura”, menciona María Fernanda Quiñones.