Dada la coyuntura por la que atraviesa el país, donde el aterrizaje del crecimiento coincide con las reformas que propone el Gobierno, la presidenta de AmCham Colombia y Aliadas, María Claudia Lacouture, analizó para EL NUEVO SIGLO las salidas y propuestas para reactivar la economía y la generación de empleo, así como la forma para incentivar la inversión.

Construir país

EL NUEVO SIGLO: ¿Consideran los empresarios que se están cerrando las puertas para establecer políticas de consenso con el Gobierno?

MARÍA CLAUDIA LACOUTURE: Si bien la actividad económica es imposible sin un marco institucional estable, la sociedad con mercados débiles o inexistentes carece de dinamismo económico y hace inviables a los países. Esto va más allá de tener puertas abiertas o cerradas, es cómo construimos un país que genere oportunidades y sea viable. El diálogo entre Gobierno y sector privado se mantiene; sin embargo, debe pasar a acciones que contribuyan a darle viabilidad al país. Cada uno, Gobierno y empresarios, tiene roles complementarios. Desde la Cámara Colombo Americana y Aliadas siempre hemos tenido toda la disposición de mantener una conversación fluida con el Ejecutivo que permita poner sobre la mesa, con claridad, las propuestas, pero también las alertas que pongan en peligro el crecimiento económico, la viabilidad de las empresas y la generación de empleo. Hemos sostenido que la coyuntura por la que atraviesa el país requiere de la participación de todos, de remangarnos la camisa y aportar. El Estado solo no puede lograr todo lo que se propone, las empresas tampoco pueden avanzar sin el Estado, así que el trabajo público-privado será fundamental para el beneficio de los colombianos.

 ENS: ¿Cómo maneja la incertidumbre sobre el rumbo de la economía el sector empresarial?

MCL: En Colombia, los gobiernos enmarcan sus planes de acción para los cuatro años que fueron elegidos y son más bien pocas las estrategias o planes que puedan considerarse de Estado y que perduren más allá de uno o dos cuatrienios. No se ven, como en otros países, partidos sólidos que impulsen propuestas de largo plazo y con el carácter para dar continuidad a las políticas que vienen dando resultados en beneficio de todos. Un ejemplo de esto son los partidos Demócrata y Republicano en Estados Unidos que, a pesar de sus diferencias, son capaces de ponerse de acuerdo en políticas de Estado.

Los empresarios, en cambio, tienen una visión de largo plazo, enfocados con estrategias claras. El sector privado analiza todas las circunstancias, siempre con ánimo propositivo, y procede con cautela y pragmatismo teniendo en mente varios años hacia adelante. El empresario apuesta por el desarrollo y la generación de empleo y es consciente de que en medio de las condiciones coyunturales se van ajustando las velas, pero sin perder de vista sus objetivos de largo plazo.

El progreso

ENS: ¿Han sido escuchados por el Gobierno y tomado en cuenta sus apreciaciones?

MCL: Hemos sido escuchados en varias instancias de la Presidencia y varios ministerios. Como en toda conversación, algunos puntos son acogidos, otros no. Es parte del proceso democrático y seguiremos aportando y opinando en los temas en los que consideramos que hay oportunidad de hacerlo mejor. Las empresas son las más interesadas en que Colombia crezca y progrese.

ENS: ¿Creen que se debe aliviar la política monetaria por parte del Banco de la República y disminuir las tasas de interés ya?

 Idealmente sí. Ha sido positivo que en las dos últimas sesiones del Banco la tasa no haya sido incrementada; no obstante, lo que espera el mercado es que empiece la reducción de las tasas de interés para que la desaceleración económica no tenga grandes efectos en la generación de empleo. Si tenemos unas altas tasas, se limita la posibilidad de acceso a recursos en las empresas para mantener y seguir desarrollando sus negocios. También las altas tasas limitan el gasto de los consumidores.

Empleo

ENS: ¿Cómo se debería desde el sector privado incentivar la generación de empleo?

MCL: Colombia necesita más empleo formal. Para ello es importante contar con una política pública que incentive a las empresas a crearlo y mantenerlo, con costos razonables y evitando aumentar la carga prestacional. La imposibilidad de tener un mercado laboral flexible y el aumento de la informalidad, entre otras variables, son palos en la rueda del empleo. Por otro lado, las fórmulas tradicionales para crear puestos de trabajo siguen siendo importantes, nos referimos a impulsar la infraestructura, la construcción de vivienda, que son jalonadoras de empleo en diferentes instancias de la economía, y con puestos de trabajo formal e ingresos las familias pueden mantener el consumo, que representa el 80 % del crecimiento económico del país.

ENS: Por su contacto con el sector externo, ¿hay prevención de los inversionistas para llegar al mercado colombiano?

MCL: Hay cautela. Se sigue de cerca la evolución de los múltiples proyectos de ley que pueden limitar el desarrollo y viabilidad del sector privado en el país. Igualmente es importante el manejo micro y macroeconómico de Colombia, como también el deterioro de la seguridad física y legal. La competencia global cada vez es mayor y Colombia no es el único país que puede ofrecer oportunidades. Un informe reciente de "The Economist" alertó que Colombia, desde el entorno empresarial, obtuvo un puntaje de 6,2 sobre 100, siendo la efectividad de las políticas públicas y el mercado laboral los que jalonan el índice del país hacia abajo, porque la estabilidad jurídica en todos los sectores no se mantiene. 

Colombia cuenta con el impuesto de renta más alto para las empresas dentro de los países de la OCDE, con un gravamen de 35 %, el cual supera la tasa promedio de 21,49 % de 2022, lo que disminuye la competitividad del país.

En el ámbito empresarial, las barreras administrativas y los costos salariales son las principales variables que contienen la generación de nuevos puestos de trabajo, especialmente en las pequeñas y medianas empresas del país, cuya contribución es alrededor de 8 de cada 10 empleos nuevos.

Inversión

ENS: ¿Temen que de alguna forma se afecte la entrada de inversión por las posiciones políticas del Gobierno?

MCL: Enviar señales de confianza y estabilidad jurídica es indispensable para lograr el interés de los inversionistas, tanto para las nuevas inversiones que se proyecten en el país, como para las existentes.

ENS: ¿Cree que, con los resultados del primer semestre, seguirá cayendo la economía este año?

MCL: La economía está en desaceleración y así lo muestran todos los indicadores del Gobierno, como las perspectivas de analistas nacionales e internacionales. Por eso nuestro mensaje de que es indispensable tomar medidas ahora para que esa reducción no sea tan drástica y que especialmente no destruya empleo. Venimos de un ciclo de crecimiento muy alto pospandemia y es normal la moderación en la economía, pero hay que evitar que los indicadores pasen a ser rojos. Este es el momento de tomar las medidas para ello.

RECUADRO

Las reformas del Gobierno

ENS: ¿Qué expectativas tienen con las reformas a la salud, pensiones y laboral que impulsar el Gobierno?

MCL: Desde la Cámara Colombo Americana hemos insistido en que debemos construir sobre lo construido y buscar fortalecer el vínculo de desarrollo social con el productivo, no debilitarlo. Debemos mantener un desarrollo del país que permita reducir las desigualdades económicas y sociales, acompañado de un proyecto de desarrollo sostenible y de una permanente y eficiente articulación público-privada en los diversos asuntos de interés nacional.

Si miramos cada una de las reformas, vemos con preocupación que este vínculo se debilita. En la reforma a la salud, por ejemplo, es importante mantener el modelo de aseguramiento mixto, que se garantice la libre elección de prestadores de servicios y se mantenga la innovación y tecnología para que los pacientes se beneficien de los avances de la medicina a nivel global. Que se construya sobre lo construido y en esa medida hemos hecho aportes al proyecto en la Cámara de Representantes.

En materia laboral, que se incentive la formalización, que los costos de crear empleo se mantengan razonables para que podamos cerrar esa brecha; que la normatividad laboral se modernice para poder atender a las nuevas necesidades de las empresas y de los trabajadores que buscan flexibilidad y nuevas opciones de trabajo.

 La mejor reforma pensional que puede tener Colombia es la generación de empleo formal, en donde los trabajadores hagan sus aportes de seguridad social y se garanticen los recursos para su retiro y disminuyendo la carga económica para el Estado. Esto se logra con una política laboral que facilite la formalidad. 

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“El Estado solo no puede lograr todo lo que se propone, las empresas tampoco pueden avanzar sin el Estado”